Esto es lo que le sucede a la zona íntima con el tiempo

Aunque no queramos, el tiempo pasa y eso se comprueba de diferentes maneras. Pensamos que solo se nota en el exterior de nuestro cuerpo, pero no es así. Con el tiempo, también hay cambios drásticos en el interior, por ejemplo, en la zona íntima.

¿Deseabas más años?

Cuando tenías 12 soñabas con tener 20 o 25. Al tener 18 también querías aumentar unos años a tu experiencia. Conforme fue avanzando el tiempo, dejaste de desear lo mismo y por el contrario, esperabas que el tiempo ya no pasara tan rápido. Pensabas que la edad solo se notaba en tu piel exterior, pero no, como te adelantaba, también tu zona V sufre cambios.

Todo es diferente

El hecho de que el tiempo pase por ti no es malo. Se trata de algo diferente en tu cuerpo. Cada una de nosotras demuestra los cambios de manera diferente de acuerdo a su estilo de vida. Las enfermedades, el ejercicio, la genética o los embarazos influyen en este proceso.

Infancia y pubertad

Desde los primeros días de vida de una bebé hasta la pubertad, el aspecto de los genitales va cambiando por la acción de las hormonas sexuales. A partir de ese momento, la zona íntima está madura y se prepara para la función reproductiva.

La vagina a los 20 y a los 30 años

Alrededor de los 20 años la vagina ya posee su tamaño definitivo. Con la menstruación el pH vaginal aumenta ligeramente. Hay que tener cuidado con las pastillas anticonceptivas, porque algunas pueden causar resequedad. Es importante tener ciertos hábitos que ayuden a que se mantenga saludable por el resto de su vida. En los 30, los labios mayores reducen su grosor, mientras que los labios internos se oscurecen. Si durante estos años eres mamá, la vagina cambia de color durante el embarazo. También se siente ancha, seca y con algo de dolor después del parto. A partir de esta edad es recomendable hacer ejercicios pélvicos para tonificar la zona.

Con el paso del tiempo

Para los 40 años la zona íntima se prepara para la menopausia. El periodo empieza a espaciarse y los niveles de estrógeno bajan, al igual que la elasticidad. La lubricación también deja de ser la misma. A los 50 las paredes vaginales adelgazan y son menos elásticas, porque hay menos grasa subcutánea. Incluso hay mujeres que sufren atrofia en la mucosa por la falta de lubricación.