Así como hay reglas de cuántas horas comer antes de ejercitarte, hay algunas cosas que jamás debes hacer después de hacer ejercicio. Aprende cuales son para dejar de hacerlas y evitar todo tipo de lesiones.
Cuando estás empezando a ejercitarte cometes errores muy básicos. La razón es que muchas veces no tienes un buen entrenador que te advierta o te guíe. Las recomendaciones de la amiga también pueden llevarte a cometer barbaridades que van a repercutir en tu salud. La recomendación principal es que te informes y no confíes en los chismes de gimnasio.
Olvidarte de estirar después de entrenar
Evita el tedioso dolor del ácido láctico. Después de hacer ejercicio es necesario estirar los músculos que acabas de ejercitar. Mucho más allá de ver los estiramientos como una oportunidad más flexible. Con estos le das a tu cuerpo la oportunidad de relajar tus músculos evitando los calambres. Además, te ayuda a disminuir el dolor que puede causarte el ácido láctico.
Comer alimentos grasosos
Comer algo después de entrenar es necesario. Sin embargo, te recomiendo que reduzcas las grasas. Acabas de hacer un fuerte entrenamiento, tanta grasa puede caerte muy mal al estómago. Cuida de tu digestión, con un poco de fruta o un sándwich estarás lista para sobrevivir hasta la hora de la comida. No salgas de inmediato a buscar una bolsa de papas, solo conseguirás remplazar las calorías que acabas de quemar.
Desvelarte
Desvelarte después de un día duro de entrenamiento es contraproducente. Durante el sueño tu cuerpo se recupera, así que tienes que dormir por lo menos ocho horas. Evita desvelarte o irte de fiesta, pues al día siguiente podrías hasta desmayarte mientras corres.
Bañarte al instante
Muchas queremos correr al vestidor inmediatamente después de salir de la caminadora. Stop… Tu temperatura está elevada, ponerte bajo la regadera puede provocarte mala circulación e incluso un fuerte resfriado. Antes de que te metas corriendo al baño espera unos minutos a que la temperatura de tu cuerpo disminuya.
Andar en tacones el resto del día
Aguas con los tacones después de entrenar. Acabas de forzar a tus músculos a trabajar arduamente. Si pasas todo el día en tacones tus pantorrillas se encontraran en constante estrés. Esto te puede provocar lesiones en tus pantorrillas y hasta en la planta del pie. No lo hagas todos los días, busca alternativas para usar zapatos de piso, que permitan que tus músculos descansen un rato.
Salir sin sudadera
Nunca… nunca salgas del gym o del lugar donde hagas ejercicio sin sudadera. Espera a que tu cuerpo baje su temperatura y abrígate al salir. De lo contrario, las lesiones se volverán un problema frecuente. Recuerda que tu cuerpo responde instintivamente al cambio de temperatura. Aunque ni siquiera lo notes, seguro aparecerá en unas horas cuando algún tirón se manifieste.