Tu postura para dormir revela mucho de tu inconsciente, muchas veces sólo llegamos a echarnos en la cama sin siquiera pensar en ello. Pero nuestros hábitos de sueño suelen ser más importantes de lo que creemos ya que hablan mucho de tu estado anímico:
Dormir boca abajo.
Eres una persona muy sociable, con poca tolerancia ante la frustración y te enfadas con facilidad.
Se dice que esta es una de las peores posiciones para dormir, ya que para respirar tenemos que tener nuestro cuello girado durante 8 horas y esto afecta las cervicales, no solo están afectando a tus músculos sino también la respiración en esta posición suele ser mala.
Dormir boca arriba.
Eres una mujer amigable, abierta a ayudar a los demás, eres alegre y muy extrovertida.
Se considera de las mejores posiciones para dormir ya que no genera presión sobre los músculos a excepción de los del cuello generando ronquidos, esto se puede prevenir con una almohada inflada, evita dolores de cabeza, cuello, ayuda a evitar las arrugas ya que no presionamos nuestro rostro contra la almohada, así como la flacidez de los senos.
Posición fetal.
Eres una persona sensible y con muy buenos sentimientos, algo tímida pero una vez en confianza te sientes segura y abierta. Tienes un exterior resistente, como una coraza, pero eres muy tímido y sensible en tu interior. Puede ser también que pienses demasiado y te preocupes innecesariamente.
Esta posición es la más antigua para dormir la utilizamos desde que eramos un feto. Si bien es buena para las embarazadas y para roncar menos, la posición fetal implica una curvatura del cuerpo que restringe la respiración diafragmática y que puede traer tensión y dolor en cuello y espalda al día siguiente. También favorece la aparición de arrugas y la flacidez en el pecho. ¿Duermes en esta posición? Si es así, utiliza una almohada gruesa que genere un buen soporte entre el hombro, el cuello y la cabeza; así evitarás encorvarte demasiado y no tendrás las desventajas que te mencioné.
De costado.
Esta es una de las posiciones más cómodas para dormir y también una de las mejores. Previene el dolor de cuello y de espalda, reduce el reflujo ácido, disminuye los ronquidos y es la posición adecuada para dormir durante el embarazo. Lo malo es que potencia la aparición de arrugas porque mantenemos la piel del rostro rozando la almohada y, en las mujeres, los senos quedan quizás forzosamente apretados contra la cama. Para quienes duermen así, se recomienda usar una almohada gruesa que llene el espacio que queda entre el hombro y la cabeza apoyada. Este tipo de almohada permite descansar con la cabeza y el cuello en una pose más neutral. Si estás embarazada, recuerda que es mejor dormir sobre el lado izquierdo del cuerpo, pues logras una mejor circulación.
Posición en tronco.
En la que el que duerme está acostado sobre su lado, las piernas están extendidas y rectas y los brazos están sobre los lados, es la segunda posición más popular.
Aunque la posición parezca rígida, la persona que duerme así es de todo menos eso. Los que duermen en tronco son muy sociales y gente muy extrovertida. Aunque les gusta hablar con todo tipo de gente, definitivamente prefieren ir con los mejores de la clase o el trabajo. Son también muy sinceros, lo que puede alguna vez hacerles parecer un poco crédulos.
