Más allá de la vitamina C que te aporta el jugo de naranja en el desayuno, hay muy buenas razones para incluir toda clase de cítricos en tu dieta. Sin embargo, como muchos otros alimentos, los cítricos contienen una amplia variedad de vitaminas y minerales. Muchos de ellos son nutrientes esenciales que favorecen tu bienestar y tu belleza. Aquí te contamos las ventajas de incluir más cítricos en tu alimentación día con día.
Combaten el cáncer
Las toronjas o pomelos, además de ser una fuente de vitamina C, contienen licopeno. Este es un fitonutriente con la capacidad más alta para para ayudar al cuerpo a combatir los daños de los radicales libres que causan cáncer. Estudios acerca de las propiedades de los limones han probado que son capaces de destruir células malignas de distintos tipos de cáncer. Algunos de ellos son cáncer de seno, de hígado y de colon.
Previenen enfermedades cardiacas
Los flavonoides de los cítricos, como kiwis, naranjas y fresas, ayudan a mejorar la circulación sanguínea vía las arterias coronarias. Además, previenen la formación de coágulos, al mismo tiempo que fortalecen las paredes capilares. Gracias a esta propiedad, contribuyen en la prevención de ataques cardiacos. Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en todo el mundo, según la Organización Mundial de la Salud.
Rejuvenecen tu piel
La vitamina C de los cítricos tiene cuatro efectos en la piel: antioxidante, regenerador, hidratante e iluminador. Por esa razón es común encontrarla como ingrediente de las cremas de belleza. Por otro lado, estimula la producción de colágeno y elastina, las fibras de soporte de la piel que mantienen su tonicidad. De hecho, previene los signos de envejecimiento ya que elimina manchas, previene arrugas e ilumina la epidermis. Por la mañana incluye toronja en tu desayuno y aplica una mascarilla de naranja y miel en tu cara. Luego de 15 minutos verás como luce radiante y lisa.
Fortalecen tu sistema inmune
Ricos en vitamina C, licopeno, vitamina K, carotenoides, ácido fólico, flavonoides, antioxidantes, cítricos como naranjas, mandarinas, limones, limas, kiwis, fresas mejoran tu visión y previenen los resfriados, la diabetes tipo 2 y promueven huesos sanos. Las naranjas y los limones contienen una sustancia llamada limonoide. Este es un antioxidante natural que impide que los radicales libres dañen el ADN de las células.
Finalmente, los cítricos contiene fibra que favorece el tránsito intestinal, por lo que previene el estreñimiento y, a la larga, disminuir las probabilidades de que desarrolles hemorroides, síndrome de intestino irritable y diverticulitis.
No dejes de lado las frutas cítricas de tu dieta. Son deliciosas y en época de calor, nada más refrescante que un jugo de naranja con toronja, agua carbonatada, una cucharadita de miel de agave, cubos de hielo al gusto y unas hojas de menta.