Existen grasas buenas y grasas malas. De hecho, tu cuerpo necesita de ella para estar saludable. Para que dejes de satanizar toooda la grasa, aquí te dejo los mitos sobre la grasa que no debes seguir creyendo.
Mito número 1: Grasa, igual a enfermedad cardiovascular
Las grasas saturadas sí son altamente nocivas para tu salud y sí pueden provocar riesgos cardiovasculares. Por otro lado, las grasas insaturadas no te pueden provocar ese mismo daño. O sea, si estás consumiendo grasas en el aceite de oliva, almendras, cacahuates, nueces, aguacate, pescado, etc. perfecto, son las más recomendables. No obstante, si provienen de alimentos de origen animal te aporta colesterol dañino para tu sistema cardiovascular. Aún así, si consumes carne, aves y lácteos de manera moderada, sus grasas no suponen un riesgo para la salud.
Mito número 2: La grasa sube los niveles de colesterol
Esta es una creencia que se ha perpetuado por años, pero los últimos estudios indican que influye pero menos de lo que se creía. Los valores de colesterol en sangre proceden de la síntesis que realiza nuestro metabolismo y de lo que comemos. Lo más importante es la manera en que nuestro cuerpo sintetiza los alimentos. Esto está condicionado por nuestra dieta general y por nuestra genética. Actualmente, se recomiendo llevar una dieta saludable en vez de reducir o eliminar alimentos específicos.
Mito número 3: Las grasas de origen vegetal son más saludables
La clasificación de las grasas se puede hacer a partir de su origen: vegetales y animales. De entrada, parece que las vegetales deben ser todas sanas y las animales, menos, pero, en realidad, no es así. La razón es que hay grasas de origen vegetal con la capacidad de obstruir arterias. Por otro lado, existen grasas de origen animal con funciones protectoras cardiovasculares, por ejemplo, las procedentes del pescado azul.
¿Seguías creyendo alguno de estos tres mitos sobre la grasa?
