La relación que tenemos con la comida no siempre es de las mejores. Cuantas veces no nos enterramos en una pizza. No aburrimos y nos comemos las papas o cualquier otra cosa. Lo peor es que muchas veces nos super castigamos.
Si hoy me comí esa pizza mañana me voy a correr 10 kilómetros… chica una cosa es estar sana y otra que te obsesiones por cosas tan superfluas como la grasa de una pizza. Por años yo pensé igual y realmente lo hacía. El extremo fue el día en que me comí una hamburguesa con papas y un helado… para al día siguiente pasar 3 horas en el gimnasio. Eso se me hacia normal, termine por ir a terapia y me gustaría compartirte algunos tips para que mejores tu relación con la comida.
Se sana no esclava de la comida
Es una enorme diferencia cuidar lo que comes sin llegar a la ortorexia, que ser esclava día con día de lo que comes. Hay que ser responsables y comer sano, pero sí un día te comes una pizza no pasa nada. Tampoco pasa nada si te comiste una galleta cada noche, eso no cambia demasiado las cosas. Ponerte en un régimen estricto de comida en muchas ocasiones no es lo más sano para ti. Cuida todos los días de tu cuerpo.. ese es un buen inicio.
Cómo comer más sano sin morir en el intento
Si tienes ganas de comer por ansiedad, respira y deja pasar al menos 10 minutos
A veces comemos solo por comer y es ahí cuando nos falla toda la ciencia. Para que esto no te pase solo tienes que respirar profundamente antes de decidir bajar a la maquinita de los dulces. Espera un poco, toma agua y distraete. Verás que de esta forma comienzas a tomar más control sobre la ansiedad.
Cómo sobreponerse ante la ansiedad
La comida no es enemiga
Todos solemos dividir la comida en buena o mala. La verdad es que puede que la chatarra no sea la mejor comida para tu cuerpo, pero ciertamente una bolsa de papitas no te va a matar. Así que sin hacer demasiado drama al respecto, acepta que solo debes moderarte y empezar a tomar decisiones conforme a tus necesidades.
Ama tu cuerpo
No porque sea delgado o grueso, sino porque te lleva a todos lados y hace muchas cosas por tí. Comienza a cuidar de tu salud sin excesos. Disfruta de la comida, deja de castigarte. La vida no tiene que ser tan dura, esa es una creencia limitante que no ponemos para justificar nuestro propio enojo.
