Hay que reconocer que para muchas de nosotras, las suegras resultan ser nuestras peores enemigas. La verdad no es un propósito que tengamos en la vida. Pero ellas muchas veces se empeñan en hacernos la vida complicada por el simple hecho de que estamos compartiendo la vida con sus hijitos. Sin embargo, a diferencia de lo que creemos, resulta que la cuñada es más tóxica que la propia suegra, sorprendente no lo crees.
Convivir con la familia política, un reto
Un medio chileno realizó una encuesta para saber un poco más sobre la relación de la chica con la familia política y saber a quién de esas personas consideran la más problemática. Los resultados, opuestos a lo que crees, arrojan que la persona más tóxica y problemática es la cuñada. En la encuesta, 56 % de las entrevistadas, aseguran que la cuñada es la más conflictiva. Sólo el 32 % piensa que ese lugar lo tiene la suegra.
Unión entre hermanos
Aunque sabemos que el amor de nuestros padres es incondicional, la relación que se forja con los hermanos es distinta. Tal vez por cuestiones de sobrevivir, nos sentimos unidos a ellos de una manera muy especial. El lazo es tan fuerte que nos hace sentirnos protectores los unos de los otros. Obviamente cuando llega alguien más, lo vemos como una amenaza de la estabilidad emocional.
Tu cuñis es más tóxica
La realidad es que muchas chicas prefieren no mencionar nada sobre los problemas con la cuñada, con tal de no crear un problema mayor. Piensan que es mejor tener una actitud “amable” por ser alguien con quien van a convivir mucho tiempo. Obviamente lo mejor es analizar por qué sientes rivalidad ante ella. Muchas veces las detestamos sin conocerlas. Si te das la oportunidad de convivir con ella, podrías notar que no es tan mala como imaginas.
