Todo lo que destruye una relación, según mis amigas…

Todos tenemos diferentes perspectivas de la vida y de todo lo que sucede en ella. Si hay un tema en el que a veces suelo tener opiniones semejantes con mis amigas, es en el del amor. Cuando una de nosotras sufre una ruptura, no dejamos de apoyarle y también vemos mal cuando los novios son los verdaderos culpables. Sin embargo, cuando hablamos de lo que destruye una relación, todas tenemos opiniones divididas. ¿Te ha pasado?

El celular

Es un hecho que si algo destruye una relación en la actualidad, es el celular. Para empezar, en ese diminuto aparatito guardamos toda nuestra privacidad. Desde los contactos que tenemos, los mensajes que enviamos, las fotos y otras tantas cosas. Con el temor de que esa información sea descubierta por extraños o en algunos casos, por la pareja, decidimos bloquear el teléfono. Sin embargo, es un hecho que por pasar tanto tiempo conectados en el móvil, nos olvidamos de todo lo demás. Una amiga cachó a su novio mandándose fotos con una chica que conoció en línea. Luego de eso terminó con él.

Mal sexo

Bien dicen que el sexo es importante para que una relación se mantenga en equilibrio. Además de la comunicación y la confianza, el sexo complementa ese círculo tan importante. El problema es cuando hay mal sexo. La fusión de la pareja deja de darse por completo y esa podría ser una fuga que sin duda afectará a la pareja.

Infidelidad

Además del celular, la infidelidad también destruye una relación. Muchos hombres y mujeres lo hacen creyendo que jamás serán descubiertos. Sin embargo, por culpa o por venganza, les pagan con la misma moneda. Cuando uno es la persona fiel de la relación, sabe que en gran medida, el que se salve o no la relación depende de lo que decida. Ya uno sabe si perdona algo tan serio o si es un fin definitivo.

Falta de comunicación

Si algo descubrí con ayuda de todas mis relaciones fallidas es que la mala comunicación puede ser el acaboce. ¿Por qué? Cuando no hablamos de manera clara cada uno entiende lo que quiere y debido a eso son los malentendidos. Luego de tantos tropiezos he aprendido a decir lo que siento en el momento y no mil días después. Si estoy enojada, debo decirlo en el momento y explicar el por qué. Lo mismo si no tengo ganas de hablar o quiero algo en específico. Eso de “lo que quieras, haz lo que desees” no llegaría muy lejos con nadie.

Mentiras y celos

Una mentira puede ser igual de grave que una infidelidad, pues cuando lo haces una vez, lo puedes hacer dos, tres y muchas otras veces.

Aunque todas tenemos perspectivas diferentes de la vida, me queda claro que sobre a lo que destruye una relación, tenemos pensamientos muy parecidos.