Consejos para tener una relación de hermanas super

Cuando era pequeña, mi hermana y yo teníamos un relación espectacular. Llevarnos solo un años de diferencia de edad lo hacia más fácil. Jugar a la cocinita o a las muñecas sin duda era más divertido, podíamos estar horas echando la imaginación a volar. En el colegio también era una ventaja, pues gracias a ella podía conocer a más personas. Sin embargo, cuando la secundaria llegó algo pasó entre ambas. Ya nuestra complicidad no era tanta y eso fue mermando la relación. Al ser solo dos, y luego no llevarte bien con tu hermana, la armonía del hogar también se afectó. Ambas decidimos que esto no podía continuar porque, en el fondo, nos queríamos mucho. El primer consejo que les puedo dar para tener una relación de hermanas super es aceptar que existe un problema y se debe resolver. No será fácil, pero sin duda vale la pena.  Con un poco de arduo trabajo de ambas, pudimos componer y forjar una hermosa relación de hermana.

Crea lazos de confianza

El segundo consejo que te doy es que tengas confianza en tu hermana. Deja de verla como un miembro más de tu extensa familia, pues no lo es. Ella será la mejor amiga que tendrás en toda tu vida. La confianza es algo que se gana con el tiempo. Te recomiendo que si la ves triste o preocupada te acerques y le preguntes  por qué está así. Abrázala y dile que puede confiar en ti, que ambas puede llegar a una solución y si eso no es posible juntas pueden pedir ayuda. También pasa más tiempo con ella, seguramente hay algo que les guste hacer juntas, como ir de compras, al gimnasio o ver películas. Verás que con estas pequeñas acciones las confianza irá creciendo.

Apoya a tu hermana en sus logros

Es importare que ella sienta y vea que estás feliz por sus logros. Comienza por interesarte en las actividades que a ella le gustan, a mí me sirvió mucho. Tampoco es necesario que te hagas experta, solo muestra empatía. Por ejemplo, si tiene un examen muy importante ayúdala a estudiar. Dedícale un par de horas al día, cuando ella vea lo que estás haciendo, te agradecerá. Así que el diez que saque en la prueba también será tuyo.

Dile lo que no te parece

Los límites son importantes en cualquier relación saludable, y en la de hermanas no es la excepción. Si con algo no estás de acuerdo, dilo, pero siempre con respeto y tranquila. En ocasiones, las hermanas no se dan cuenta de que dejar la ropa tirada, por ejemplo, es molesto para ti, sobre todo si comparten una habitación. Pídele pare, pues  también es tu espacio. No digas la frases: “¡No quiero que estés aquí!” o “siempre me haces la vida imposible”, nada de eso. Lleguen a un acuerdo, y si no es posible no dudes en pedir ayuda a un mediador, como a otro hermano a uno de tus padres.

¿Qué tal te llevas con tu hermana?