Una de las metas de vida que todas tenemos clara es ser mujeres íntegras y felices. Además, estamos en un momento en el que la sociedad comienza a reconocernos y a darnos un lugar en el mundo. Por tanto, es el momento indicado para empoderarnos y tomar el control de nuestra vida y felicidad. No obstante, no siempre sabemos cómo sentirnos satisfechas con nosotras mismas. Por eso, una psicóloga nos comparte algunas pautas para sentirnos más felices día a día. Conoce algunas y dime si te ayudan.
Eres responsable de tu vida y felicidad
Yo sé que existen ciertos factores externos que, en ocasiones, nos obligan a tomar ciertas decisiones. En este sentido pueden llevarnos hacia lugares que no son los indicados para nosotras. Sin embargo, recuerda que siempre podremos hacer algo al respecto. Tal vez no puedas moverte del lugar en el que te encuentras, pero está en ti tomarlo de la mejor forma posible o hundirte. Así mismo, si sabes que tienes una oportunidad para cambiar las cosas, es tu obligación hacerlo. Nadie vendrá a salvarte o a hacer las cosas por ti, tú eres responsable tanto de tu vida como de tu felicidad.
Conoce tus límites y expectativas
Ser responsables de nuestra felicidad conlleva el autoconocimiento, es decir, debemos saber cuáles son nuestros límites y nuestras habilidades. Sólo de esa forma podremos saber que somos capaces de hacer con más facilidad y en qué otras cosas debemos poner más empeño. En este sentido debemos reconocer que las limitantes no son un obstáculo insuperable. Simplemente debes trabajar en ellas para superarlas.
Ten claras tus metas
Necesitamos tener claro qué es aquello que queremos, esas metas serán nuestra motivación diaria para seguir incluso en los peores momentos. Por tanto define qué es lo que quieres y cómo lo quieres. No importa qué tan difícil parezca, lo importante es que te pongas en acción para conseguirlo.
Tú eres el amor más grande de tu vida
Jamás debes olvidar que el amor más grande de tu vida eres tú. En este sentido, cada cosa que hagas o dejes de hacer en tu vida es por tu bienestar. Por tanto debes mantenerte como tu prioridad y jamás permanezcas en sitios que nos sean convenientes. Tampoco aceptes tratos que no mereces. Finalmente, aleja a las personas que no aportan algo positivo a tu vida.