11 cosas que debes considerar cuando tu pareja te engañó pero aún lo amas

La infidelidad es un asunto bastante complicado. Por otra parte, si ambos deciden continuar, hay algunas cosas que debes considerar cuando tu pareja te engaña. Hay algunas que lo superan maravillosamente, aunque claro, puede tardar cierto tiempo.

1.- Es la primera vez

Cuando tu pareja te lastima de esta manera las dudas empiezan a surgir en tu cabeza. ¿Será la primera vez que lo ha hecho o ya lleva varias? Si se trata de la primera vez, la relación puede salvarse con ayuda de ambos. Sería más difícil si tu pareja tiene ya un historial de infidelidades. Mira hacia atrás y sé muy sincera contigo misma. Si no es la primera vez que lo hace y llevas tiempo intentando que las cosas funcionen, es momento de recapacitar.

2.- Estás dispuesta a dejarlo pasar

La persona que ha sido engañada tiene que tomar en consideración que a partir de este momento surgirá la desconfianza hacia su pareja. Este sentimiento de enojo y falta de confianza no va a desaparecer de la noche a la mañana. Medita si estás dispuesta a superar esto. Por fácil que parezca, nada será igual cuando lo veas cerca de otra persona. Es aquí donde radica el verdadero problema.

3.- Qué es lo que sucede en tu relación

Cuando se da una infidelidad, normalmente hay un problema dentro de la relación. Las cosas no suceden por que sí. Un hombre enamorado no engaña, un hombre confundido sí. Tu pareja sufrió un tropiezo, pueden hablar y recuperar la relación. Son una pareja así que esta decisión debe de ser tomada por los dos.

4.- ¿Vas a poder perdonarlo?

Perdonar una infidelidad no es nada fácil. Es un proceso largo, doloroso y tedioso. Vas a pasar por todo un duelo, así te quedes a su lado o no. Si aún lo amas, puedes intentarlo. Finalmente, perdonar es lo mejor que puedes hacer para salir adelante.

5.- Quieres o no saber lo que ocurrió

No te claves queriendo saber qué fue lo que paso. La sordidez de los detalles te puede hacer mucho daño. Los hilos que hay detrás de una infidelidad son muchos más de lo que imaginas. Hacer retrospectivas de lo ocurrido no es sano ni benéfico para ti.

6.- Cómo lo van a resolver como pareja

Como dije, esta es una decisión de pareja. No porque tú quieras arreglar las cosas significa que él también está dispuesto. Si ambos aceptan intentarlo, no hay más que seguir hacia adelante. Evita a toda costa rogarle a un hombre que te engañó y te lastimó, no intentes retener a quien no quiere recuperar la relación. ¿Para qué quieres a alguien así a tu lado?

7.- Él está dispuesto a seguir

El hecho de que él esté dispuesto a seguir no significa que tú debas aceptarlo. Tienes libre albedrío. Tienes el poder de decidir por ti misma lo que quieres hacer. Lo que más te beneficie. Hay hombres que tras varias infidelidades ruegan por una segunda oportunidad. ¿Funciona? La mayoría de los casos no. La realidad es que el compromiso de pareja se ve afectado si son varias veces que uno de los integrantes lo hace.

8.- En cuánto tiempo se te pasará el duelo

En cada persona esta fase es diferente. Dependerá de cuánto tiempo estuviste con él. Algunos dicen que dura el doble de tiempo que tu relación. Yo soy una fiel creyente del positivismo. Una vez que dejes ir las cosas que no necesitas de tu vida, las circunstancias empezarán a mejorar. Ya sea que lo perdones y se dediquen a sanar la relación, o bien, dejarlo ir por completo.

9.- Cómo vas a recuperar la confianza

Dale tiempo al tiempo… Es, trillado, lo sé; pero es la única manera de seguir adelante. La confianza n0 se recupera de la noche a la mañana. Te lo puedo decir por experiencia, así que vas a tener que hacer acopio de paciencia.

10.- La felicidad regresa

Por supuesto que sí. Las relaciones que superan una infidelidad pueden superar problemas peores. El amor hace milagros y es maravilloso. Retomar la relación implica un sacrificio por parte de ambos, pues los dos deben para mejorarla.

11.- Cómo aseguras que no vuelve a hacerlo

Voy a ser la persona más cruda: no puedes. El comportamiento humano es errático. No puedes tener el control sobre la conducta de alguien, ni siquiera tus hijos. Es un salto de fe. Verdaderamente es un signo de amor.

Cuando tu pareja te engaña tienes dos opciones: quedarte o irte; la que decidas estará bien, siempre que sea tu deseo.