Los lipsticks oscuros no han pasado de moda, en realidad llegaron para quedarse. Hay una inmensa variedad de tonos que favorecen a pieles muy claras y a morenas. Por lo tanto, te pasamos los tips básicos para que sepas cuándo usarlos.
Cuándo sí:
- Después de exfoliar tus labios. Los lipsticks oscuros destacan cada una de las arruguitas y pellejitos en tus labios así que más vale tener una apariencia más pulida exfoliándolos.
- Cuando el resto de tu makeup es discreto. Los labios oscuros son un un punto focal, así que el resto de tu maquillaje debe complementarlos, no opacarlos o competir con ellos. Los maquillajes sobrecargados no son nada sexys.
- Luego de depilarte. Los lipsticks oscuros llevarán la atención a tu boca y no queremos que se vean algunos vellitos no deseados por ahí.
- Cuando tienes un delineador del tono. El delineador ayuda a que el lipstick no se corra, por lo tanto es vital que lo uses sin necesariamente regresar a la moda de los 2000.
Cuándo no:
- Cuando tus labios estén demasiado resecos. Los lipsticks mate tienden a resecar tus labios más que los demás. Lo puedes resolver exfoliándolos y aplicando un bálsamos de labios antes.
- Con sombras oscuras o llamativas. Por puro balance te recomendamos un solo punto focal: tus labios o tus ojos.
- Si llevas maxiaretes coloridos. Los maxiaretes estarán demasiado cerca de tus labios así que te recomendamos que tanto la forma como los colores no compita
- Con ropa del mismo color. No es muy favorecedor hacer que todo tu outfit combine exactamente al mismo tono. Excepto con el color negro. Procura variar un par de tonos y que tus lipsticks oscuros formen un contraste.
- Si tienes la piel muy bronceada u oliva. La característica de estos lipsticks es crear un contraste por eso necesita pieles morenas o blancas. En el caso de las pieles oliva o que tienden al amarillo o naranja puedes probar tonos oscuros de café que sean cálidos.