La ansiedad puede ser el peor amigo de cualquiera de nosotras cuando estamos a dieta. Hacer dieta no es nada fácil, pues se cambian los hábitos por completo. No te desanimes, puedes hacerlo de manera exitosa.
No dejes que la ansiedad acabe contigo
La clave para tener éxito en tu dieta es que no quieras bajar de peso super rápido. Sé paciente y constante para que puedas llegar a tu meta sin ansiedad. Si no te desesperas, no sufrirás con la dieta que estés haciendo.
Sopas
Antes del almuerzo o la cena, ingerir sopa es una gran idea, pues este alimento te sacia más y no querrás comer tanto. Lo ideal es que sean sopas desgrasadas y caseras y si tienen vegetales mucho mejor. Trata de que no pasen más de tres horas entre cada comida que hagas. Hacer dieta no se trata de NO COMER, se trata de comer de manera adecuada. Si te quedas sin comer mucho tiempo, querrás comer más cuando tengas oportunidad de hacerlo. A media mañana, después de almorzar y antes de merendar come algo ligero.
Agua, no puede faltar jamás
Debes tomar suficiente agua día a día, notarás que con el tiempo se convierte en un hábito muy bueno. Si tomas suficiente agua diariamente, podrás adelgazar más fácilmente. El agua te hace sentir menos apetito mientras eliminas las toxinas de tu cuerpo. Las gelatinas también te ayudan, no aportan tantas calorías y como tienen agua te ayudan a mantenerte hidratada.
Ejercicio
El ejercicio te ayuda a mantener tu mente despejada. Además, tu metabolismo se acelera y procesas mejor los alimentos. De esta forma no pensarás todo el día en comida y no te sentirás ansiosa por querer comer a cada rato. El principal éxito de una dieta es la perseverancia, concentración, paciencia y autocontrol.