¿Te has preguntado si es amor o costumbre? No es algo que se responda fácil. Puede ocurrir que exista amor, pero que también se presente la costumbre; o que la ausencia del primero cada vez más evidente, dé paso a la segunda.
Cuando sí existe amor
Es normal que en relaciones consolidadas se presenten rutinas y situaciones habituales que dan paso a la costumbre. Sin embargo, esta no necesariamente excluye al amor de tu relación.
El amor puede coexistir con la costumbre, pues hemos llegado a un punto de la relación en el que conocemos muy bien a la otra persona. Incluso, podemos predecir cómo responderá o actuará ante ciertas circunstancias.
Cuando la falta de amor va dando paso a la costumbre
El aburrimiento está presente en todas sus actividades y los momentos de risa han ido desapareciendo. Algunos de sus comportamientos te avergüenzan y el sexo se volvió algo rutinario. Definitivamente, ya no es una de tus prioridades y si pasas días enteros sin verlo no te sientes mal. ¿Te suena familiar?
Es común que cuando llevamos tiempo con alguien, en algún momento decidamos no dejar evolucionar la relación y quedarnos estancados. Es más sencillo permanecer con alguien que ya conocemos, que atrevernos a conocer a alguien nuevo. La comodidad es lo que más influye cuando elegimos quedarnos con alguien que ya no amamos.
Cada uno de nosotros sabe si ha dejado de amar a su pareja, o si está dejando de hacerlo, o si lo que siente por ella se resume en cariño y agradecimiento, pero no en amor. El momento de la crisis ha llegado y es preciso enfrentarlo. Hagan un análisis honesto de si la costumbre ha pasado a ser más fuerte que el amor. Si el amor le gana a la costumbre, deben hacer cambios para poder continuar con su relación.
