Creo que fui una niña muy precoz en bastantes cosas, una de ellas fue mi sexualidad. A la edad de 7 u 8 años yo me preguntaba si me gustaban más lo niños o las niñas. En aquel entonces yo no tenía ni idea de lo que era ser “gay”. Mi mayor acercamiento al mundo de la diversidad sexual. Fue cuando mi mamá me explicó lo que era un “maricón”, un término que salió en una de esas novelas mexicanas y que obviamente yo no entendía.

¿Niñas o niños?

Probablemente muchos pensarían que el que me explicarán que a algunos hombres les gustan otros hombres cambió mi vida. La verdad es que como una niña de 8 años me dio exactamente igual. Por eso veo tan inútil tratar de envenenar la mente de un niño explicándole lo que es la diversidad sexual. En mi humilde opinión los niños entienden perfecto. Es simplemente amor hacia otra persona, no hay más en la mente de un niño. Es después que la sociedad le pone una connotación positiva o negativa pero esa es otra historia. Durante toda mi infancia me pregunté si me gustaban las niñas. Porque solía prestarle mucha atención a mis compañeras rubias, estaba fascinada con su cabello claro y los moñitos de colores que se veían más bonitos en su cabello que en el mio.

La adolescencia siendo “Bisexual”

Llegado el momento de empezar a prestar atención a mi sexualidad llegue a la conclusión de que era bisexual. En aquel momento me gustaba más ver el cuerpo desnudo de una mujer que el de un hombre, que francamente se me hacía la cosa más inestética de este mundo. Pase la mayor parte de mi adolescencia dibujando mujeres, hasta la fecha lo hago.  También note que me excitaba mucho más ver a una chica que a un chico. Sin embargo llego la primera punzada de mi vida cuando caí perdidamente enamorada de un chico de mi secundaria.Entonces ya estaba bastante confundida ¿me gustaban más las chicas o los chicos? me límite a concluir que solo los años me lo dirían. Salí con chicas y chicos durante mi adolescencia y fue hasta hace poco que me di cuenta que…

Soy completamente ¿heterosexual?

Entrada a mi edad adulta ya había experimentado relaciones, sexo y hasta relaciones abiertas con ambos sexos. Mis relaciones con las chicas nunca serán tan largas y tampoco fueron tan profundas. Fué hasta que cumpli 27 que comencé a salir exclusivamente con hombres. Que me cayo el 20 de un montón de cosas que no había notado antes.

• La razón por la que me gustaba más el cuerpo de una mujer que el de un hombre hace años, era porque no tenía realmente mucha experiencia sexual con hombres. Es normal que veas más estético tu cuerpo porque has crecido con él. Por lo tanto ver algo diferente siempre te da como asquito al principio. Especialmente cuando estas puberta y no conoces mucho acerca de nada. Además las mujeres no somos muy visuales
• Mis relaciones con chicas siempre fueron una excusa para probar cosas diferentes y no quedarme con la duda. Siempre creí que no podría averiguar cuál era mi verdadera sexualidad si no probaba ambas cosas.
• Nunca me enamore de una chica, tuve lazos muy cercanos con algunas pero nunca llegué a enamorarme de ellas. Les cobre un gran cariño pero hoy podría asegurar que no fue un amor tan profundo como el que le he dado a algunos chicos.
• Ahora veo muy diferente el cuerpo de un hombre. Al grado de que me he vuelto mucho más visual. Me di cuenta que mis más grandes amores siempre han sido hombres y con ellos sí he hecho una verdadera conexión.

Ahora que he madurado un poco más puedo decir que ¿deje de ser bi? ¿nunca lo fuí?

Realmente lo único que puedo decir al respecto es que hoy sé que soy completamente heterosexual. Después de experimentarlo durante mi adolescencia y con la conciencia que me han otorgado los años , la reflexión y la madurez. Puedo por fin decir que amo a los hombres y me atraen mil veces más que las mujeres. No me arrepiento de haber experimentado como lo hice en su momento y tampoco considero haber jugado con mis parejas femeninas. Al contrario, creo que en su momento di todo mi cariño y fueron parte de mi crecimiento personal. La chica confundida dejó de estarlo con los años, conociéndose a si misma mucho mejor. Quizás esta experiencia no le sirva de mucho a las chicas o chicos que tienen duda de su heterosexualidad. En mi experiencia solo puedes saber quien eres experimentando lo que te da curiosidad. Esto aplica con todas las cosas de tu vida: carrera, trabajo, comida, ejercicio.

Después de todo cómo sabrías si te gusta la papaya si nunca la has probado. Aguas, claro que para algunos está clarísimo. Hay muchos hombres que en su vida tocarían a otro hombre y mujeres de la misma forma. Hay que respetar, experimentar es una decisión personal. Tampoco se debe juzgar a quienes tienen muy en claro lo que les gusta y lo que no. Volviendo al ejemplo de la papaya , hay gente que huele este fruta y ni de broma se atreve a comerla porque les da asco.