Las venas varicosas o várices son venas hinchadas y dilatadas que por lo general aparecen en las piernas. Se identifican por ser rojas y azules y, en los peores casos, muy saltonas. Estas tienen distintos orígenes y son difíciles de prevenir, pues desde la genética hasta tu estilo de vida predisponen a su aparición.
Por lo general, las venas varicosas no causan ningún problema médico o de salud, aunque algunas personas sí experimentan dolor e incomodidad. Otras personas experimentan palpitaciones, calambres, calor, pesadez e hinchazón leve en las piernas. Cuando los síntomas no son especialmente fuertes, puedes poner en práctica los siguientes consejos para disminuir la incomodidad y evitar que las várices empeoren.
Hacer ejercicio
Para fomentar la circulación sanguínea en las piernas es crucial ponerlas en marcha. Un ejercicio simple como salir a dar una caminata puede ayudar muchísimo a la condición de las venas varicosas.
Tener un peso saludable
Cuando pierdes peso, liberas a tus venas de presión excesiva. Esto se ve traducido en un alivio para tus piernas y las molestias que pueden tener por las várices. Si necesitas bajar algunos kilos para alcanzar tu peso saludable, sigue algunos de estos consejos para poder perder peso de manera sencilla y eficaz.
Cuidado con los zapatos
Los zapatos que usas también tienen repercusiones en el estado de tus várices. Los zapatos con tacón bajo ejercitan mejor los músculos de tus pantorrillas que los altos. Esto es mucho más beneficioso para tus venas. Si piensas que vas a sacrificar moda por comodidad, no te preocupes. Te dejo aquí algunas opciones lindísimas de zapatos cómodos que puedes usar.
Ojo con tu ropa
La ropa que es muy ajustada en la cintura, piernas o ingles no te conviene si padeces de venas varicosas. Las prendas que pueden ayudarte a promover el flujo de sangre son las medias de compresión. Esta calcetas presionan las piernas y ayudan a las venas y a los músculos de las piernas a mover la sangre de manera más eficiente.
Levanta tus piernas
Tómate algunos descansos durante el día y levanta tus piernas a la altura del corazón. No hace falta que estés así 10 minutos, pero al menos unos 30 segundos en esta posición te será de muchísima ayuda.
Cambia de posición cada 30 minutos
Estamos acostumbradas a pasar varias horas en la misma posición frente a la computadora o la televisión. Esto no favorece a la circulación sanguínea y por ende, propicia las várices. Pon una alarma para moverte cada 30 minutos. Puedes solo ponerte de pie y hacer algunos estiramientos o caminata breve. Este cambio en tu rutina no solo te beneficiará en el estado de tus venas, aquí más beneficios de dejar una vida sedentaria.
Si no sientes mejoría en tus venas, hay otros tratamientos a los que te puedes someter. En este artículo puedes encontrar otras opciones para tratar venas varicosas.
