Señales que ayudan a detectar el cáncer en niños de manera temprana

El cáncer es uno de esos temas de los que nadie quiere hablar. Sin embargo, es una de las enfermedades que afecta a muchas personas de distintas formas. Entre ellos se encuentra el cáncer infantil, como segunda causa de muerte por enfermedad entre los 4 y 14 años de edad, al menos en México.

Es diferente al cáncer de adulto

La mayoría de los padecimientos son de causa desconocida a comparación del cáncer de adulto. Por fortuna existen nuevos medicamentos y terapias que ayudan en este proceso. Entre éstas, está la inmunoterapia. Con las nuevas tecnologías, los niños tienen 80% más posibilidades de salir adelante.

Leucemia

La leucemia es una enfermedad de los órganos productores de sangre. El término leucemia, significa sangre blanca. Los glóbulos blancos o leucocitos se producen en la médula ósea y el cuerpo los usa para combatir diferentes enfermedades. Cuando hay leucemia, se da un aumento incontrolable de glóbulos blancos. Las células cancerosas impiden que se produzcan glóbulos rojos, plaquetas y glóbulos blancos maduros. Estas células malas se pueden extender al torrente sanguíneo o ganglios linfáticos, además de otras partes del cuerpo. La leucemia afecta a niños y adultos y se divide en aguda (progresa rápido) y crónica (progresa lento).

Cáncer infantil

En México, la leucemia es el cáncer infantil más común. La mayoría de casos son diagnosticados cuando ya está avanzada la enfermedad. Eso incrementa el costo del tratamiento y el tiempo del mismo. Para saber que la salud de tu pequeño está en óptimas condiciones, es importante que acuda a todas sus revisiones médicas. Existen síntomas que pueden ayudarte a saber si algo está mal. Entre ellos están: inflamación de ganglios, crecimiento de bazo e hígado, pequeños o enormes moretones, sangrado de nariz o encía, distensión abdominal o náuseas frecuentes. En caso de que hubiera diagnóstico de leucemia, entre más pronto se actúe, el pequeño podrá tener una vida plena. Con el diagnóstico, el pequeño puede recibir como tratamiento cirugía, radioterapia, quimioterapia, trasplante de células hematopoyéticas o inmunoterapias para contrarrestar el mal.