Los remedios caseros han sido utilizado desde hace muchísimo tiempo por nuestras abuelas para curarnos una variedad de malestares. Sin embargo, los médicos están en contra de ellos porque dicen que no reducen las molestias de las enfermedades como los medicamentos.
No obstante, todas sabemos que son efectivos y que muchas veces nos sacan de apuros por estar elaborados con materiales que tenemos en casa, la mayor parte del tiempo.
Remedios caseros
En las siguientes líneas te mostraré algunos de los remedios más efectivos a la hora de curar un resfriado. Verás lo bien que te sientes cuando los tomes.
Jengibre, antigripal por naturaleza
Sus propiedades son analgésicas, antipiréticas y antibacteriales.
Puedes preparar una infusión con jengibre de la siguiente manera:
- Pica una cucharada de jengibre.
- Agrega esa porción en una taza de agua hirviendo. Puedes agregar limón o miel a tu gusto.
- Bébelo, cuidando no quemarte.
Líquidos calientes
Como nuestras abuelas nos decían cuando estábamos resfriados, “lo mejor es beber algo caliente”. Y un estudio de la Universidad de Cardiff confirma esa idea al decir y refiere: “las bebidas calientes proporcionan alivio inmediato al flujo nasal”.
Mantenerse hidratado
No solo es beber líquidos calientes, debes complementar tu recuperación con bebidas a temperatura ambiente, como agua, jugos, sueros o ponches.
Vaporizaciones con eucalipto
El eucalipto ayuda a que se abran las vías respiratorias y alivia la irritación de la garganta, pues tiene propiedades expectorantes.
Modo de realizar las vaporizaciones:
- Vierte agua caliente en una vasija amplia.
- Agrega aceite u hojas de eucalipto.
- Coloca una toalla sobre tu cabeza e inclínate sobre la vasija, de modo que la toalla te cubra para que puedas inhalar el vapor.
Finalmente, estos remedios caseros te ayudarán a sentirte mejor, pero recuerda que es preciso acudir a un médico si los malestares continúan.
