Olvídate del dolor después del entrenamiento

Entrenar es una de las actividades más relajantes de la vida. Cuando ya llevas tiempo entrenando, te ayuda a relajarte y a tener más energía durante el día. Sin embargo, cuando estás comenzando lo único que sientes es dolor. No es tan fuerte, pero la mayor parte del tiempo es incómodo. Por eso, en ocasiones ni siquiera quieres ir al gym o hacer la rutina completa. No obstante, dejar el ejercicio solo empeora el problema. Olvídate del dolor con estos sencillos trucos.

Come después del entrenamiento

Es necesario que siempre ingieras alimentos ricos en proteínas después de tu entrenamiento. Esta condición es inamovible cuando sigues una rutina para aumentar masa muscular. De esa manera la proteína le permite a tus músculos regenerarse tras haber roto cada fibra. Puedes acudir con un nutricionista para que te diseñe una dieta especializada acorde a tus necesidades. No obstante, tal vez pueda servirte esta pequeña lista.

  • Atún
  • Salmón
  • Frutos secos
  • Yogur
  • Arroz y frijoles
  • Pechuga de pollo

 

El descanso es necesario

 Olvídate del dolor con un poco de descanso tras tu rutina de ejercicio. En este sentido, dormir le permite a tus músculos regenerarse de forma adecuada. Sin embargo, se trata de un descanso corto tal vez de 30 a 60 minutos. No conviene que sea más prolongado porque cuando quieras realizar otra actividad, tus músculos se tensarán y te dolerán más que antes.

 Si el dolor es muy fuerte, puedes recurrir a los analgésicos

En general, después de entrenar puedes sentir un poco de pesadez muscular. Esta aumenta con los días, más aún si no realizas actividad física de manera frecuente. Sin embargo, no debiera paralizarte, si te sientes de esa manera, lo más seguro es que hayas lastimado alguno de tus músculos. Por tanto, es necesario que recurras con un fisioterapeuta. Él sabrá qué es lo que sucede, mientras tanto, puedes tomar un par de analgésicos para calmar el dolor. También puedes ponerte compresas de agua fría.