Incorporar buenos hábitos a nuestra vida puede ayudarnos a prevenir la aparición de cáncer de mama. Medidas como moderar el consumo de alcohol y tabaco, y controlar el peso contribuyen a reducir el riesgo de cáncer de seno. Así mismo, realizar ejercicio aeróbico regularmente y consumir mayor cantidad de alimentos de origen vegetal puede favorecer la reducción del riesgo de padecer la enfermedad. Además, en sobrevivientes de este mal, tales medidas pueden contribuir a evitar una recaída.
Un estudio español demostró que las mujeres sedentarias tienen 71% más riesgo de desarrollar cáncer de seno. Los investigadores aseguran que se debe a que el ejercicio físico ayuda a la reducción de la masa grasa y al aumento de la masa muscular. Estos buenos hábitos son muy importantes para evitar enfermedades metabólicas. Otro estudio realizado en Los Ángeles demostró una disminución en la taza de mortalidad en mujeres que consumían menos grasas.
Puedes incorporar los siguientes buenos hábitos a tu vida para evitar padecer esta enfermedad o la recaída.
Consume mayor cantidad de productos vegetales
Los alimentos de origen vegetal contienen nutrientes y compuestos esenciales para nuestra salud. Determinados compuestos químicos producidos por las plantas, han demostrado ser muy útiles para protegernos del cáncer y otras enfermedades.
En cuanto a los granos enteros y sus derivados, se recomienda optar por recetas que contengan cebada, trigo integral y arroz silvestre. Así como consumir pan integral y cereales integrales, como la avena y el salvado.
Consume alimentos de temporada
Los alimentos frescos deben preferirse a los alimentos procesados para incorporar nutrientes saludables y antioxidantes a nuestro organismo.
Reduce grasas y azúcares
Para lograr una dieta equilibrada y saludable, este mayor consumo de vegetales, frutas y granos enteros debe integrarse en un menú bajo en grasas. Por ello se recomienda evitar consumir carne todos los días. Algunas recomendaciones para reducir el consumo de grasa implican la utilización de aceite de oliva o aceite de canola. Así mismo elegir productos lácteos bajos en grasa. También debe limitarse el consumo de azúcares y de refrescos, así como moderar la ingesta de alcohol.
Ejercítate
Para mantener un peso adecuado es necesario practicar ejercicio. Diversos estudios han demostrado que las mujeres regularmente activas tienen 30% menos probabilidades de desarrollar cáncer de mama que las inactivas.
Finalmente, un consejo simple es utilizar las escaleras en vez del ascensor. También, estacionar el auto lejos del lugar de destino. Ya sea mantenerte activa así o con la práctica de un deporte específico, debe realizarse diario de 20 a 30 minutos.