No importa si nunca has hecho ejercicio o si tienes algún padecimiento, para todas las personas existen diferentes maneras de ponerse en forma. Y las chicas con escoliosis no son la excepción. Ohh, espera, ¿no sabes qué es eso? En ese caso sólo te queda una opción: seguir leyendo y descubrirlo. Quizá conozcas a alguien con ese padecimiento, pero ni tú y esa persona lo saben.
Sí, es-co-lio-sis
Este padecimiento es una curvatura anormal de la columna vertebral. Para que entiendas perfectamente tienes que saber que la columna tiene curvas normales (que son las fisiológicas) y otras que no lo son. En la cervical y la lumbar se encuentra la lordosis, que es una curva hacia el interior y es normal. En la columna dorsal tenemos la cifosis, que es una curva hacia el exterior e igual es normal. Pero la escoliosis es una torsión o rotación de la curva de la columna vertebral, de modo que se asemeja a una C o S. Además, pueden presentarse al mismo tiempo dos curvas, una superior y otra inferior, una en la dirección opuesta a la otra, o puede haber una curva en una sola dirección.
¿Tiene solución?
Las personas tienen la posibilidad de corregir la escoliosis, si ésta es detectada a tiempo. De hecho, una manera de tener mejoría es realizando ejercicios que trabajen el área de la columna. Un ejemplo es la siguiente rutina. Claro, primero tienes que consultar con tu médico y tener su aprobación, ya que cada persona es un caso diferente.
Estiramiento del gato
Enfócate en trabajar vértebra por vértebra, de modo que tómate tu tiempo. También cuida tu respiración. Realiza una serie de tres repeticiones.
Puente de hombros
Antes de subir tienes que inhalar, y al exhalar empieza a elevar tu pubis, vértebra por vértebra. Quédate arriba unos cinco segundos. Inhala, y al exhalar empieza a bajar, vértebra por vértebra. Realza una serie de cinco repeticiones.
El caracol
Siéntate sobre los talones. Inhala y exhala. Vuelve a inhalar y al exhalar baja la barbilla. Poco a poco baja la parte superior de tu cuerpo, mientras estiras los brazos hasta estar totalmente abajo. Realiza una serie de tres repeticiones.
Otras opciones
También puedes practicar pilates y natación, ya que ambos son ejercicios que trabajan todo el cuerpo. Para que no tengas dudas, conoce el efecto que cada práctica tendrá en ti.
- Pilates. Este método es una buena herramienta para aliviar todo tipo de dolencias. Mediante el trabajo equitativo entre la fuerza, la flexibilidad, la conciencia del cuerpo y el balance se pueden corregir alteraciones en los hombros, rodillas, cuello y, por supuesto, la espalda.
- Natación. Mediante esta disciplina fortificarás los músculos de la espalda. Además, estar en el agua produce una sensación de ligereza, lo cual minimiza la tensión de la columna. Lo más probable es que te pongan una rutina con lo estilos de espalda y crol porque no fuerzan ni doblan los músculos de la columna. Caso contrario son los estilos mariposa y braza, los cuales sí fuerzan un poco el arco de la columna.