Cuando estás enamorada sientes que todo es miel sobre hojuelas y es maravilloso. Sin embargo, el amor correspondido te hace engordar, pero ¿sabes por qué ocurre? Te explico a continuación.
Tu relación te hace engordar
A todas las parejas estables les sucederá en algún momento de la relación. La cuestión es que muchas veces no saben por qué han ganado kilos. Es posible evitarlo y entender por qué sucede, ¡toma nota!
Te sientes segura con la relación
Al estar en la relación, sientes seguridad y nada te preocupa. Incluso dejas de pensar que otras mujeres puedan ser más atractivas que tú. Justo en ese momento, es cuando comienzas a descuidarte de manera inconsciente.
Piropos y más piropos
La relación está en su máximo apogeo y derraman miel por doquier, tanto así que buscan cumplir hasta sus más mínimos caprichos. Si salen a cenar y tú quieres dos postres, él jamás te dirá que no los pidas. Entonces poco a poco comienzas a comer más y más.
Dejan de ser importantes los complejos
Pasado un tiempo de la relación, la confianza está en su máximo esplendor y los complejos dejan de ser importantes. Para cuando la relación se ha consolidado, te darás cuenta de lo mucho que le gustas y excitas a tu pareja. Como te sientes segura con tu figura, te permites más libertad respecto a la comida.
Dejas de lado las actividades físicas
Si estás acostumbrada a hacer algún ejercicio pero ha llegado una pareja a tu vida, es probable que lo único que desees sea pasar más tiempo con el susodicho. Sin embargo, no debes olvidar que además de tener una relación, tienes una vida que no se puede detener ni cambiar al 100% por la llegada de alguien.
El sofá, el tercero de una relación
Ya que estás con tu chico y todo es felicidad, lo único que desean es pasar tiempo acurrucados comiendo pizza y viendo series o películas. Es un placer culposo, pero es una de las peores decisiones que puedes tomar. Pasar demasiado tiempo sentados les hará tener sobrepeso.
¿Tu relación te ha engordado?
