Descubre cómo la dieta ayuda a combatir los problemas de la tiroides

Tu salud es muy importante y es necesario que cada cierto tiempo te hagas un chequeo para saber que todo está bien, y si no, tomar cartas en el asunto lo más pronto posible. Entre las enfermedades que más se presentan están las relacionadas con la glándula tiroides. Padecimientos como el hiper e hipotiroidismo pueden complicarse si no se tienen los cuidados necesarios. Además del tratamiento que te indique el médico, es posible combatir los problemas de la tiroides con una dieta adecuada. ¿Quieres saber más?

Actividad metabólica

La glándula tiroides actúa sobre el metabolismo de cada una de nosotras. Cuando hay problema de tiroides es por la producción anormal de la hormona tiroidea. El exceso de producción de hormonas se denomina hipertiroidismo. La más común es la enfermedad de Graves. Por el contrario, el hipotiroidismo se presenta cuando hay una producción insuficiente de la hormona tiroidea. Aunque en ocasiones las enfermedades relacionadas con glándula son difíciles de detectar, es importante no desistir, pues podría tratarse incluso de cáncer.

Cómo combatir los problemas de la tiroides

Además del tratamiento farmacológico que el especialista te prescriba, es posible combatir los problemas de la tiroides llevando una alimentación adecuada. Toma nota.

Dieta para el hipertiroidismo:

  • Bayas. Ayudan a reducir la inflamación de la tiroides gracias a sus antioxidantes.
  • Brócoli. Disminuye la producción de la hormona tiroidea.
  • Lácteos. Ayudan a prevenir la osteoporosis causada por el hipertiroidismo.
  • Pavo, frijoles y nueces. Dan proteínas al cuerpo para que se mantenga sano.
  • Salmón. Contiene vitamina D, que ayuda a absorber el calcio, y omega 3.

Para el hipotiroidismo:

  • Aceite de coco. Proporciona ácidos grasos que favorecen el metabolismo saludable. Es fácil de digerir y nutre el sistema digestivo. Mejora la función cerebral y estabiliza los niveles digestivos.
  • Agua. Tomar suficiente agua ayuda a mejorar las funciones digestivas.
  • Fibra. Disminuye las dificultades digestivas. Favorece la salud del corazón y equilibra los niveles de azúcar en la sangre.
  • Frutas y verduras. Tienen vitaminas y minerales necesarios para combatir el daño de los radicales libres. También reducen la inflamación digestiva.
  • Semillas germinadas. Proporcionan omega 3, que ayuda a la función tiroidea y el equilibrio hormonal.

Lo más importante es que no olvides la supervisión médica para obtener los beneficios necesarios. Recuerda que las dietas no funcionan igual para todas. Es fundamental considerar tus condiciones específicas.