En algunas ocasiones confundimos términos como “natural” con inocuo. Existen diferentes alimentos que consumidos con moderación tienen beneficios para nuestra salud. Sin embargo, al ser consumidos en exceso pueden ser muy perjudiciales para nuestro cuerpo.
Jengibre
Aunque está indicado para tratar algunas molestias estomacales y en algunas dietas para perder peso, comer demasiada raíz de jengibre puede causar acidez estomacal, diarrea e irritación en la boca. También puedes experimentar eructos, dolor de estómago, mal sabor de boca, hinchazón, gases y náuseas. Así mismo, ha habido casos en los que tragar el jengibre sin haberlo masticado lo suficiente ha causado obstrucción intestinal. Por otro lado, puede reducir el azúcar en la sangre, lo que podría causar problemas si tienes diabetes o hipoglucemia. Comer grandes cantidades de jengibre o tomar suplementos en dosis altas podría hacer que algunas enfermedades del corazón empeoren.
Cola de caballo
Esta infusión es un gran diurético que si se toma en exceso puede tener efectos secundarios en nuestro cuerpo. La dosis diaria recomendada de la infusión de cola de caballo es de dos tazas. Además no debe tomarse durante mucho tiempo seguido, ya que, puede aumentar la pérdida de potasio en el organismo debido principalmente a su acción como diurético. Si se bebe en exceso puede provocar nerviosismo, dolor de cabeza y arritmias. Además se encuentra contraindicada para personas con presión arterial baja o con niveles de potasio bajos en sangre.
Chía
La chia es una gran fuente de fibra, la cual ayuda a regular el tránsito intestinal, controla la ansiedad de comer y brinda una sensación de saciedad. Sin embargo, el abuso de este producto puede provocar estreñimiento y deshidratación. Los adultos no deben sobrepasar las tres cucharadas al día. La chía se encarga de absorber el agua del organismo, por esto es importante tomar abundante líquido. De no hacerlo, podría perjudicar la actividad normal de los intestinos o, incluso, ocasionar una oclusión intestinal debido al exceso de fibra en el organismo. Otro riesgo en el abuso del consumo de esta semilla es que obstaculiza la absorción de minerales, como el zinc y el calcio.
Leche
De acuerdo con un estudio publicado por una revista de medicina, consumir leche aumenta el riesgo de fracturas y la mortalidad en general. Se descubrió que las mujeres que tomaban tres o más vasos de leche al día tenían mayor riesgo de mortalidad que las que tomaban menos de un vaso por día. Así mismo, documentaron que el consumo de esta bebida no reduce el riesgo de fracturas. En cuanto a los hombres, igualmente tuvieron mayor riesgo de mortalidad al beber leche en exceso. Además de que aumentó su riesgo de sufrir facturas. Esto se debe a que la leche activa un mecanismo celular llamado estrés oxidativo. Este puede causar la muerte celular y por ende, la muerte de tejido. Este mecanismo, a largo plazo, genera la muerte de una persona.
Es importante aclarar que la leche materna es saludable para los bebés, y que la mayoría de las personas que toman leche no estarían afectadas por su ingesta. Sólo las que la toman en exceso, lo que equivale a tres o más vasos de leche por día.
