Todas sabemos que los tenis son el calzado más cómodo. Sin embargo, a veces pensamos que un par de tenis nos pueden servir para realizar nuestras actividades a lo largo del día. Vamos con ellos a la oficina, con las amigas y, peor aún, a correr, al crossfit y a miles de actividades diferentes. No obstante, existe un tipo de tenis especial para cada actividad. Con esto tampoco te animo a que compres unos tenis para cada día de la semana. De hecho, lo único que intento es evitarte las temidas lesiones en los pies que se dan por utilizar el calzado inadecuado.
Para correr o para entrenar
Al buscar unos buenos tenis para correr debes fijarte en tres aspectos principales:
- Tienen que ser livianos. Para reconocer que lo son, pruébatelos y camina un poco. Unos buenos tenis para correr suelen ser muy livianos. En cambio, el calzado para entrenar suele tener un textil un poco más resistente.
- Te da estabilidad. Fíjate en un espejo cómo estás caminando con ellos. Pruébate varios, así podrás determinar cuál se ajusta más al movimiento de tu cuerpo.
- Proporcionan amortiguación. Mientras más pesada seas, necesitarás más amortiguación. Es importante que tomes en cuenta el lugar donde corres o haces ejercicio. Mientras que correr en pavimento necesita de más amortiguación, correr en una banda no la requiere tanto.
Existen diferentes tipos de suela para cada actividad. Sin embargo, lo más importante es que elijas un calzado que se ajuste a tu pisada, a menos de que vayas a correr o entrenar en montaña. Si corres en bosque o montaña, necesitarás unos tenis con una buena cubierta que pueda proteger a tu pie de posibles accidentes. Por eso, las suelas de los tenis son tan diferentes. Las suelas más resistentes corresponden a tenis para correr en montaña, donde hay más riesgo de tropezar con piedras, varas, troncos, etc.
La vida útil de unos tenis
No te dejes llevar por la publicidad cuando vayas a elegir tus tenis para cada actividad. Además de probarte varios y poner a prueba su estabilidad y la amortiguación, tienes que saber cuándo cambiarlos. La vida útil de unos tenis se mide en kilómetros. Su duración oscila entre los 800 y 1000 kilómetros. Esto depende de la actividad que realices y de la frecuencia con la que lo hagas. Una clara señal de que tus tenis están dando de sí es la suela. Cuando esta se vea limada y lisa es tiempo de cambiar los tenis a la de ya.