La ropa interior que deberías tener ¡sin falta!

La ropa interior siempre será parte de nuestras vidas. Para engancharnos completamente existen diferentes tipos y diseños encantadores. Toda mujer debería tener estas piezas de ropa interior ¡pues son hermosas! Si no me crees, obsérvalo tú misma. Además, te aconsejo con qué prendas puedes usarlas y en qué ocasiones también.

Tanga

La tanga es una pieza de ropa interior muy sexy, ideal para esos momentos candentes. La tanga de encaje es que es más cómoda que las tangas de un solo hilo. Por si fuera poco, puedes usarla a diario y no se marcará a través del pantalón, leggins o falda. Toda mujer debería tener una tanga entre su ropa interior; ya sabes, para esos casos amorosos.

Bikini

No, no me refiero al bikini del traje de baño, sino a la prenda de ropa interior que es de mayor tamaño que una tanga y menor que uno calzones. Este se caracteriza por ser de una tela delgada de los lados y que cubre gran parte de tu trasero. Además, es una pieza sexy, cómoda y práctica pues se mantienen en su lugar gracias a su corte bajo. Ideal para el día a día o cuando usas unos leggins, falda o vestido algo ajustado.

Calzones

Una pieza de ropa interior tan cómoda que es perfecta para el uso diario. No es muy sexy, pero ¿qué importa?, eso es lo de menos. Esta prenda no es tan ajustada ni tan floja. Se adapta a tus necesidades y por si fuera poco, no son nada aburridos. Podrás encontrar de diferentes colores y con diseños divertidos; aunque nadie los verá, al menos podrás sentirte cómoda y divertida.

Boy shorts

¡Uno de mis favoritos! Yo los uso para dormir pues son como unos boxers de hombre pero más pegado al cuerpo. Y sí, de hecho se inspiraron en los boxers para crear los boy shorts. Son muy cómodos, ideales para esas ocasiones cuando usas falda, short o vestido con movimiento. Ya sabes, en caso de que se presente un vientecito no pasarás el oso de enseñar los calzones a los demás.

A la cintura

Si creíste que habían pasado de moda estás muy equivocada pues han vuelto con muchas más fuerzas. Aunque no lo creas, se amolda perfectamente a tu cuerpo creando una ilusión de una cintura más pequeña y un cuerpo más curvilíneo.