El primer amor es una experiencia que nos hace ver al mundo de un modo completamente diferente. Se experimentan emociones y sentimientos que de otra manera no se conocerían. Al estar enamorada, eres más accesible, ves todo distinto y siempre estás de buen humor. Aunque sí, no siempre todo es de color rosa. Si no has olvidado a tu primer amor, debes leer esto.
Amor, amor, amor
Al vivir el primer amor experimentas cosquilleo en tu cuerpo, te estremeces con el primer beso. Las palabras que te dice el ser amado son las mejores que has escuchado en toda tu existencia. Todo parece válido y justificable.
Los adolescentes
La experiencia del primer amor, que no has olvidado, se da en la etapa de la adolescencia. En esta etapa, todos damos un enorme paso en el que dejamos atrás la infancia. Además, nos vamos identificando más con nuestros pares y es justo cuando más discusiones hay con mamá y papá.
Vulnerabilidad total
Al experimentar el primer amor, los adolescentes se sienten vulnerables. Este período se caracteriza por los grandes contrastes que marca. Hay emociones fuertes, inseguridad, incertidumbre. Los padres deben marcar una muy buena comunicación para que los hijos puedan sobrevivir las turbulencias de esta etapa con todo el apoyo posible. Además, respecto a los temas del amor, experimentarán varias sensaciones y es mejor que tengan orientación.
Por qué no has olvidado a ese amor
Además de sentir cosas bonitas, también experimentas celos, desilusión, enojo, frustración o impotencia. Es probable que no hayas sentido nada de esto antes, o al menos no de la misma magnitud. Esta experiencia servirá como referencia para las futuras relaciones que tengas. Hay casos en los que el primer amor dura toda la vida, otros en los que sólo está para dejar algún aprendizaje.
¿Tú por qué no has olvidado a esa persona?, te dejó bonitos o malos recuerdos…
