Una relación tiene diferentes etapas; desde el enamoramiento hasta el amor verdadero; sin embargo no todos somos capaces de experimentarlos. A veces, al llegar al final de la relación, los hábitos, la personalidad y las actitudes de esa persona hace que nos cuestionemos un poco sobre el amor que sentimos. ¿Sientes algo extraño en tu relación? Tal vez sea porque ya no amas más a tu pareja, pero ¿cómo saberlo? Estas son las señales que te ayudarán a descubrirlo.
Limitas el contacto físico
Ya no abrazas a tu pareja como antes ni tampoco lo besas mucho; de hecho, evitas el contacto físico. Ni se diga de la intimidad, prefieres tocarte a ti misma a que tu pareja lo haga. Claro, para él es un poco extraño tu comportamiento, incluso para ti un poco. Bueno, deja de preguntarte por qué pues la respuesta es simple: ¡ya no lo amas!
Ya no lo incluyes en tus planes familiares, con amigos o en pocas palabras, en tu vida
Antes era normal llevarlo a las cenas familiares o invitarlo al cine con tus amigos, pero ahora prefieres separarlos un poco. Sabes muy en el fondo que los sentimientos están cambiando, así que prefieres no incluir a tu pareja en tus actividades. Prefieres andar por tu cuenta, de hecho prefieres irte sola a tu casa o no con su compañía.
Ya no hablan como antes
Sí te pasaba algo interesante, algún logro o simplemente veías algo gracioso, tu pareja era la primera persona a quien se lo contabas. Ahora, se lo cuentas a tu mejor amiga o incluso te lo guardas, simplemente porque la comunicación ha cambiado. Una de las señales más importantes que recalcan que ya no lo amas más.
Ya no lo llamas tanto por su apodo dulce
“Mi amor”, “cariño”, “bebé”, etc. Todos esos apodos dulces que se decían, tu pareja aún te llama por tu apodo, pero tú ya comienzas a llamarlo por su nombre. Es como acostumbrarlo a que todo volverá a ser como cuando eran unos desconocidos y solo se llamaban por su nombre.
Te cuesta decir “te amo”
Claro, aún existe el cariño hacia a esta persona pero el amor, lo dudas un poco. Han pasado por muchísimos buenos y malos momentos juntos, lo que hizo que el amor floreciera entre ustedes. Sin embargo, ya no es la misma persona que te enamoró al principio.