Las mentiras tarde o temprano salen a la luz, hasta el más cauteloso de los mentirosos cae.
Nadie puede mantener las mentiras en secreto, son como una telaraña. Al decir una mentira, las cosas se van enredando cada vez más y más, pero siempre habrá un cabo suelto: alguna persona que vio u oyó algo.
Por eso, debes de abrir bien los ojos para descubrir la verdad. Más aún cuando las mentiras pueden afectarte.
Hay mentiras que a veces se dicen para no lastimar a un ser querido, sin embargo el engaño puede llegar a destruir familias, vidas, y por supuesto esto siempre termina en desgracia.
Hay señales que delatan a quien nos está mintiendo:
No te mira a la cara.
Según expertos, el lenguaje corporal hace que las personas nos miren a los ojos mientras hablamos cara a cara. Cosa que no pasa cuando mentimos. Bajar la mirada o desviarla inconscientemente quiere decir que algo le tratamos de ocultar a la otra persona. Si al enfrentar a alguien cuando tratamos de confrontarlo nos desvía la mirada, sospecha que no está siendo sincero.
Cambio de historias.
Se contradice cuando te intenta explicar algo. Existen inconsistencias en las historias que te cuenta. Trata de cambiar el tema y no contesta firmemente a las preguntas que le haces. Tarde o temprano va a caer, esta red de mentiras es imposible de recordar al 100% por una persona. Ser astuta es lo mejor en estos casos, preguntar demás hará que se enrede más en sus propias mentiras y caiga por su mismo peso.
Se le va el avión.
Pon mucha atención a la forma en la que te cuenta las cosas. ¿Hace pausas mientras te intenta decir algo? ¿Tartamudea y se pone muy nervioso mientras habla? ¿Su voz cambia? ¿Habla pausado? La voz nos cambia cuando mentimos.
Está a la defensiva.
Cuando das en el clavo, se empieza a poner nervioso y se pone a la defensiva. Se enoja cuando comienza a contradecirse, se pone muy nervioso y trata de evadir la discusión hacia otro lado. El nerviosismo y el enojo es una forma de cubrir la situación.
Trata de esconder su teléfono.
O bien lo vea una hora especifica del día sin mencionar si alguien le ha mandado algo. Tiene reacciones extrañas cuando llegas de improviso y lo ves con el celular.