Cuando empiezas a compartir tu vida con alguien deseas que sea la persona indicada. Sabes que le estás abriendo las puertas de tu corazón y de tu vida en general. Esperas que esa persona sea lo mejor que te ha pasado y también deseas que jamás te falle. ¿Y si no lo es? ¿Cómo saber si colmará tus expectativas, si podrás confiarle tus secretos y amarlo sin reservas?
¿Cómo saber que la persona indicada ha llegado a tu vida?
Es un hecho que en tu camino se cruzarán muchas personas que no son la persona indicada. También es probable que pierdas la fe en algún momento. Sin embargo, lo mejor será que te sobrepongas a cualquier relación mala. De esta forma te demuestras a ti misma que no te dejas vencer tan fácilmente.
Claves para identificar a la persona correcta
Para que una persona pueda encontrar el equilibrio con una pareja, primero debe tenerlo con ella misma. Si no estás bien contigo mismo, no esperes estar bien con los demás. Lo principal es que estés consciente de eso para que así sepas qué es lo que mereces.
¿Permite que seas tú?
Si estás compartiendo tu vida con alguien, esa persona tiene que aceptarte tal cual eres. No ganarás nada con alguien que quiera cambiarte a su conveniencia. Tampoco se trata de que justifiques todos tus actos porque “tú eres así”. Se trata de que no pierdas tu esencia porque alguien más te lo pide.
¿Tranquila o intranquila?
La persona indicada hará que te sientas bien siempre, en confianza y segura. Si no es una buena persona para ti, habrá de todo menos tranquilidad en tu vida.
¿Se preocupa por sí mismo?
La autoestima es básica para el bienestar de cualquier persona. Si la persona con la que has decidido compartir tu vida tiene buena autoestima, es probable que su relación marche bien. De lo contrario, podrías toparte con alguien que poco a poco vaya absorbiendo tu autoestima, canibalice tu confianza en ti misma y te convierta en un manojo de inseguridad y baja energía.