“Lo amo pero él no quiere tener hijos”…
Es normal que llegue el momento en toda relación estable de hablar de hijos.
¿Pero y si uno de los integrantes no los quiere?
Razones por las que él no quiere tener hijos
Antes que nada, debes de saber que este tema se debe de hablar detenidamente. Existen algunos casos donde se puede hacer algo al respecto y algunos otros en los que el plan B tendrá que ser la opción.
- Economía.
Un hombre sensato sabe cuando pueden adentrarse en una responsabilidad tan grande. Si no es el caso, ten un poco de paciencia. Tener un buen sustento va a quitarte mucho peso de encima. Tener un bebé requiere de bastantes ingresos. - Aún no se siente preparado para ser padre.
Algunos hombres sienten miedo de no estar preparados para ser padres. Quizás piensan que alguna parte de su crecimiento aún no está del todo completa. Si es el caso, habla con él. Quizás él quiera experimentar más cosas antes de ser papá, lo cual es sumamente respetable. Esta es una decisión muy importante. Después de este paso, ¡la pareja enfrentará muchos retos y nada volverá a ser igual! Tómatelo con calma, háblalo y pregúntale en que momento sería buena idea volver a comentarlo. - Si él no los quiere.
Si antes de casarse acordaron que no habría hijos, debes respetar ese acuerdo. Es por eso que deben platicar del tema antes de casarse. Si ya te comentó que no quiere hijos, puedes darle a conocer tus inquietudes. Si bien puede que llegue a ceder, esto no siempre resulta. Sin embargo, es importante que reconozcas en lo que te estás metiendo. Si él no quiere, es hora de empezar a aceptar que ese NO es rotundo. - No puedes obligar a nadie a ser padre. Es una decisión de pareja, por lo que es bueno tomar en cuenta si es conveniente seguir en una relación donde los planes del presente y futuro son opuestos. El bienestar de esa personita que quieres traer al mundo está en juego.
¿Qué se puede hacer?
Esperar a que tu pareja cambie de parecer puede ser desgastante. ¡Puede que él nunca se decida! Como dijimos antes, ser padre por imposición es de las peores cosas que puedes hacer. Es jugar con la libertad que tiene tu pareja de decidir sobre su paternidad.
- ¿Qué es lo que quieres? Reflexiona acerca del tema. Averigua si es realmente lo que deseas. Si decides que esta decisión no es un capricho, ya has reflexionado lo suficiente.
- Respeta la decisión de tu pareja. Una relación está basada en el respeto, por lo que no puedes ignorar los deseos de tu pareja. Mucho menos si este tema ya había sido tocado y tú estabas de acuerdo con ello.
- Toma tu libertad. Es cierto que debemos respetar al otro. Pero si tu anhelo es tener un hijo, también debes hacerle honor a tu libertad. No hay nada que te impida tener el mejor regalo que la vida nos da. Para esto, quizás tengas que dejarlo ir. Es una decisión muy importante que debes de hacer a conciencia.
- Dejar a la pareja. No es nada fácil, ni debe de ser tomado a la ligera. Pregúntate si eres capaz de estar en una relación en la que no tienen un futuro en común, considerando que tener un bebés es algo esencial para ti. Sé muy sincera contigo misma, sin tomar las opiniones de terceros. ¿Qué propósito tienes en tu vida?, ¿vas a ser feliz con tu pareja sin tener hijos? Cuando contestes esto de corazón, sin pensar en el exterior y dejando de lado los impedimentos sociales, te aseguro que la respuesta vendrá sola.
Buscar la felicidad en esta vida debe de ser prioridad para cada una de nosotras.
No es algo que debamos tomar a la ligera.