La sensación de que algo no va tan bien como debería te acecha durante algunos momentos del día. Las relaciones de muchos años siempre tienen altas y baja, por lo que las crisis son algo relativamente normal. Después de nueve años con la misma pareja, puedo asegurarte que salvar tu relación no solo es tu trabajo. Finalmente las relaciones siempre involucran a dos personas. Por tanto, toma la iniciativa. Dicen por ahí que no hay peor lucha que la que no se hace.
¿Mi relación tiene arreglo?
Es muy común caer en círculos viciosos cuando identificas que algo no está del todo bien en tu relación. Así que empieza con alguna que otra pelea o desacuerdo. Algunas discrepancias de opinión y una temporada en la que parece que solo se ven para pelear. Es de lo más extraño, pero te puedo asegurar que si aún pelean, tu relación puede tener arreglo. Lo realmente preocupante es llegar al punto en que te has resignado y no le ves el caso a seguir peleando por tu relación. El día en que te dé igual estar o no estar con tu pareja esclara señal de que todo ha acabado. En cambio, si aún tienes amor por tu pareja, estas son algunas medidas que puedes adoptar para salvar tu relación.
1.- Hablar claro
Creo que algunas parejas le quitan mucho valor a la comunicación por no querer empeorar las cosas. Mientras el chico en cuestión está enojado porque no entiende a su pareja. La mujer no hace más que seguir enredando, por no decirle las cosas directamente. HABLA CLARO, dile las cosas de forma muy directa. Los hombres no entienden indirectas, créemelo lo tengo más que comprobado. Tampoco te estoy diciendo que se lo digas con poco tacto. Con el amor que le tienes a tu pareja háblale de lo que te molesta y dile cómo te sientes. La comunicación lo es todo para salvar tu relación.
2.- Encuentren soluciones prácticas
Cuando estás en una relación de tanto tiempo, debes aprender a ceder y a ser muy práctica. Encuentra con tu pareja soluciones, no más problemas. Si te aqueja que lo sientes distante, trata de ponerte un poco más en sus zapatos. Permite que él te de su punto de vista y lleguen a un acuerdo entre los dos.
3.- Perdonar y olvidar es básico
Tienes que entender algo de las relaciones a largo plazo: guardar piedritas año con año no es una opción. Recriminarse lo que pasó hace tres años no es algo sano ni justo para ninguno de los dos. Cuando se vive en pareja, lo pasado debe quedarse ahí y en el presente solo disfrutar lo que tienes. Una palabra tan sencilla como “perdóname” puede crear un gran alboroto si no se dice en serio. Para salvar tu relación se deben perdonar el uno al otro sin condiciones.
4.- Sé un ser individual dentro de tu relación
Estando en una relación de tanto tiempo tu individualidad comienza a perderse. Es super normal que esto pase, aun más a las mujeres que a los hombres. Siempre recuerda que eres un ser individual, no necesitas una media naranja , pues de hecho no naciste incompleta. El equilibrio dentro de una pareja solo puede obtenerse si ambas personas conservan su individualidad, metas propias, amigos y, por supuesto, también tiempo a solas. Tener una pareja de tres o cuatro años no significa estar pegada a él todo el tiempo. La distancia es buena, te deja extrañar al otro y hacer tus propias actividades. Es sano tener una cierta distancia dentro de una relación.
5.- Piensa en las razones por las cuales están juntos
El amor es algo ideal en los primeros meses de noviazgo. Ambos comienzan a salir, se conocen, encuentran algunas cosas en común y todo es maravilloso. He de decirte que el amor ideal que todos buscan dista mucho de la realidad. La realidad siempre es mejor, pero no por ello quiere decir que sea fácil. Aprendes a crecer con tu pareja, a aceptar lo bueno y también lo malo. Se toma un camino junto a la otra persona, por eso es tan importante pensar en cuántas razones tienes para estar con él. ¿Tienen una meta en común? ¿Quieren las mismas cosas? Solo cuando hay un camino compartido la relación puede funcionar.
Si estás dispuesta a salvar tu relación a toda costa, solo me queda decirte que tú sola no puedes sacarla a flote. Solo cuando ambas personas quieren mejorar, el cambio se lleva a cabo.