Tanto las actitudes como los sentimientos son más claros de lo que queremos aceptar. El amor valora, reconoce y respeta tanto los sentimientos como las acciones que se realizan en una relación de pareja. Por tanto, si tu amado no reconoce lo que haces por ambos, tal vez no lo haga jamás…
El amor propio primero
Antes de iniciar una relación amorosa debes amarte primero. Sé que todos lo dicen, pero pocos lo llevan a la práctica. Cuando sabes quién eres, lo que quieres y lo que estás dispuesta a aceptar, no permites que alguien te lastime. Así mismo buscas para su relación un ambiente sano en el que ambos encuentren apoyo, respeto y comprensión mutua. Por tanto, cuando no te amas sueles aceptar cualquier tipo de relación y trato. Además, algunas personas pueden aprovecharse de ello.
Un hombre llega hasta donde la mujer quiere
Si ese chico ve que constantemente perdonas sus groserías y faltas de respeto, no cambiará. Recuerda que los límites los pones tú. En consecuencia si acostumbras a perdonar lo imperdonable él creerá que sin importar lo que haga, siempre estarás para él. Con esto no quiero decir que sea tu culpa, pues sé que así como hay personas comprometidas también las hay aprovechadas. Por tanto, mira tu relación desde lejos y pregúntate ¿siempre ha sido así? Si la respuesta es afirmativa, entonces está en ti salir de ella.
Si no te valora, tal vez tampoco te quiere
Una vez mi madre me dijo: “Las personas están donde y con quien quieren estar”. Si lo pensamos un poco, podemos recordar que cuando realmente amas a alguien o algo haces hasta lo imposible por tenerlo y mantenerlo. Ya sea una relación o un objetivo. Por tanto y lógicamente cuando alguien o algo no nos interesa o lo creemos seguro, no movemos si quiera un dedo para alcanzarlo. Sé que duele, pero lo mejor es dejarlo ir. A final de cuentas tienes a la persona más importante de tu vida: a ti. ¿No crees?
