Motivos por lo que las cabronas son atractivas para los hombres

¿Por qué a los hombres los atraen más las cabronas? Esas mujeres despeinadas, independientes, insensibles, sin mencionar su gran autoestima y control. ¿Será que a los hombres les gusta que jueguen con ellos? Es una interesante pregunta. A veces ser la chica “buena” en el amor es agotador cuando ninguno se fija en ti. Nosotras te decimos los motivos por lo que las cabronas siempre tienen a los hombres bajo sus encantos.

Las mujeres cabronas se han ganado la fama de alejar y atemorizar a los hombres que se fijan en ellas. Pareciera que son inconquistables, pero lo cierto es que a ellas les han roto el corazón también. Muchas mujeres se han cuestionado ¿qué tienen las cabronas que atraen tanto a los hombres? He aquí la respuesta.

Ellos buscan ganarse el amor de una cabrona

A los hombres les gustan las mujeres guapas, sensuales y atrevidas, pero sobre todo que sean difíciles de conquistar. Para ellos es como ganar un trofeo cuando se logra conquistar a una cabrona. A ellas les importa ser amadas, pero no ruegan por el amor de un hombre. Al ser mujeres tan independientes, demuestran que no necesitan al hombre que les abra la puerta al salir o a uno que las proteja, porque ellas pueden solas.

El objetivo de las cabronas

El objetivo de una cabrona es que el hombre no esté por encima de ellos. Buscan que se den cuenta que con él y sin él pueden estar perfectamente bien. Los hombres prefieren conquistar a su chica día a día y aunque parezca un poco machista les encanta ser el todo de este tipo de mujeres. Cosa que no pasará porque una cabrona ve más allá que el amor de su pareja.

No buscan a las chicas buenas

Un hombre prefiere a enamorar a una chica difícil en vez de una chica necesitada. Por ejemplo, una chica muy dulce hará lo necesario para consentir a su hombre y cuando este no le haga caso hará algún tipo de berrinche. Mientras que la cabrona no endulza las cosas, va directo al grano sobre lo que quiere y espera de su hombre.

Una chica muy dulce saca a su niña interior y, en ocasiones, sus intereses o actividades son algo infantiles para los hombres. La cabrona se cree más adulta y demuestra madurez ante lo que se presente. Su filosofía es “sin rodeos, ni tonterías”.

En las discusiones, la chica dulce llora por el daño emocional que le causa la discusión, pero la cabrona, no. Las cabronas solo se irán sin decir una sola palabra. Dejarán que el silencio hable por ella y regresarán cuando se sientan listas para estar con su pareja.