Nosotros como padres de familia tenemos el deber de enseñar buenos modales a nuestros hijos. De no hacerlo, no nos sorprendamos si en algún momento truenan la boca al masticar o si olvidan las palabras mágicas “por favor” y “gracias” cuando piden algo. Recordemos que ellos aprenden más de lo que ven que de lo que escuchan. Entonces, con estos ejemplos podremos darnos cuenta de que el error comienza con nosotros.
Para que sean ciudadanos de bien, debemos mostrarle las formas adecuadas de comportarse. Aunque no lo creas, nuestros hijos han venido aprendiendo la lección observando los límites que marcas y las reacciones que tienes con sus actitudes.
Si desde pequeños empezamos a mostrarles los buenos modales, será más fácil que los adopten. Y también se les facilitará entender las indicaciones que les des después.
Formas de enseñar buenos modales
Ser el ejemplo a seguir
Nuestros hijos, cuando son pequeños, querrán ser como nosotros, así que debes estar muy consciente de eso. Tienes que dar el mejor ejemplo posible. Utiliza siempre un lenguaje cortés para que el pequeño lo tome como parte de su formación. “Por favor”, “gracias”, “con permiso”, “salud”, “de nada” son algunas de las palabras básicas que debe incluir en su vocabulario. Al principio no las dirá, pero si tú las utilizas día con día, cuando ya hable te sorprenderá lo que ha aprendido de ti.
Empieza con lo básico
Queremos enseñarles todo lo bueno, pero a veces somos un poco exagerados y deseamos lograrlo en pocos días. Y tampoco se trata de eso. Está bien que los niños parecen esponjas que absorben todo, pero la enseñanza lleva tiempo y precisa paciencia. Las primeras veces, cuando ya hable nuestro hijo, podemos ayudarlo diciendo frases como: “¿qué se dice?”, “¿cómo se pide?”. Así ellos van entendiendo en qué parte de la dinámica entran los buenos modales.
Saludar a las personas
Cuando empiece a hablar, enséñalo a decir “hola”, cuando llegue, y “adiós”, al irse. Habrá veces en que sea tímido o llore, en esos casos no lo presiones. Lo que menos queremos es que nuestros hijos se sientan obligados. Entonces es bueno ir preparándolos al decirles: “Llegaremos a casa del abuelito. Cuando abra la puerta le dirás: ‘hola, abuelito’. Y le darás un beso. ¿Está bien?”.
Enséñale a compartir los juguetes
Las primeras peleas entre los niños son a causa de los juguetes, pues a veces todos quieren usar el mismo. Dile que cada compañero puede tener un turno con el juguete para que así lo puedan usar todos. Además, aclárale que no debe usar la violencia para adquirir las cosas. Al término de una jornada indícale qué cosas hizo bien para que vayan grabándose en su cabeza. Y no olvides que por muy inocente que parezca, que arrebates algo a algún familiar es justo lo que estás tratando de evitar en la conducta de tu hijo.
Como ves, no es tan difícil enseñarle buenos modales a nuestros hijos. La cuestión es que pongamos el empeño necesario para lograrlo. Ellos te lo agradecerán más adelante.
¿Tú cómo le enseñaste buenos modales a tus hijos?