Las princesas anteriormente eran vistas como las heroínas de las niñas alrededor del mundo, porque tienen la vida perfecta.
Lucen hermosas, encuentran a su príncipe y viven felices para siempre. Sin embargo, actualmente ese estereotipo se ha modificado.
Ahora las princesas no son sólo niñas bonitas que esperan ser rescatadas para tener un final feliz. Van por su propio pie a buscar una mejor vida para ellas, sin importar que no halla un hombre a su lado.
Se han dado cuenta de que lo indispensable es que se amen a sí mismas y lo demás es solo complemento.
Tenemos que ser conscientes del mensaje subliminal que le enviamos a nuestras hijas con los programas que ven. De esto dependerá mucho el desenvolvimiento que tengan en todos los aspectos de su existencia.
Será un gran referente para la vida que deseen vivir. Optarán por ser personas felices o no.
Estamos de acuerdo como mamás, en que no queremos niñas infelices ni conformistas, sino mujeres que luchen por sus ideales y que se amen y acepten a sí mismas.
Maneras en que las princesas influyen en nuestras hijas
A continuación menciono unas de las causas de mayor impacto y por las que creo que debemos replantear el hecho de permitir que nuestras hijas quieran seguir ese estereotipo de mujer.
Problemas de estereotipo de género
La profesora Sarah Coyn, de la Universidad Brigham Young, observó el comportamiento de 198 niños. De estos, 96% de las niñas y 87% de los niños se relacionan con películas de Disney.
Los resultados arrojados son alarmantes porque las niñas indicaron que el jugar con muñecas y juegos de té son actividades que únicamente realizan las mujeres.
Además, esto influye de manera negativa en su autoestima, pues acostumbrando a ver que las princesas sufren pero logran sus objetivos y vivir felices para siempre.
En palabras de la doctora: “Las princesas de Disney representan uno de los primeros ejemplos de la ‘figura ideal’. Como mujeres, este estándar empieza con las princesas de Disney a la edad de tres o cuatro años”.
Aceptación de sí mismas
Las pequeñas pueden desarrollar baja autoestima si nosotras como madres no las guiamos al respecto. El ver figuras delgadas y bien vestidas y peinadas crean conflicto en su aceptación.
Tenemos que enseñarles que todas las mujeres somos diferentes, pero cada una en esa diversidad es hermosa y única.
Recientemente han aparecido otro tipo de princesas con un enfoque distinto al que la mayoría de nosotras conocemos.
De nosotras como mamás dependerá en gran medida el enfoque que nuestra hija aplique en su vida. En primera instancia, porque nosotras somos su imagen guía.
Por otro lado, si dejamos que vean cualquier tipo de programa corremos el riesgo de que reciban mensajes erróneos.
Modo de ver la vida
Las nuevas princesas son valientes e independientes y luchan por sus ideales, sin esperar a que un hombre llegue a rescatarlas. Se creen capaces de hacer las cosas y no esperan que les resuelvan la vida.
Con mensajes así, les estamos diciendo a nuestras hijas que son autosuficientes.
Que pueden lograr lo que se propongan con esmero y dedicación.
Es una labor difícil que requiere compromiso de nuestra parte. De eso dependerá en gran medida el modo de vida que queramos para nuestras hijas.
Recuerda que es importante que ellas y nosotras nos amemos por ser quienes somos. Nunca dejemos de luchar por lo que nos propongamos.
