Lubricantes: todo lo que debes saber al respecto

Para que el sexo sea mejor y novedoso existen accesorios que te ayudarán. Vibradores, anillos, lubricantes, todos con una finalidad en común, que el sexo sea divertido. Aprende a sacarles el máximo provecho para que tus experiencias sean más placenteras.

¿Sabes usar los lubricantes?

Sin importar si son relaciones sexuales vaginales o anales, los lubricantes son bienvenidos. Los lubricantes son tal vez uno de los productos más importantes a la hora del sexo. El cuerpo por si solo produce lubricación. Sin embargo, hay veces en que ciertos factores pueden afectarla. Además, es importante tener presente que sin la lubricación necesaria, el acto sexual puede ser doloroso.

Tipos de lubricantes

  • Base de agua. Son universales, no manchan, se limpian fácilmente y son seguros de usar con condón. No deben usarse en el agua porque se diluyen. Puedes sacarles el máximo provecho en la masturbación, sexo vaginal o anal. Su sensación es similar a la de la vagina. Entre más líquido sea, puedes usarlo para todo tipo de juegos. Si son más espesos, ayudan en encuentros prolongados.
  • Lubricantes anales. La piel del recto es diferente, delicada, además de no tener lubricación. Los lubricantes anales tienen mayor consistencia, además de incluir ingredientes relajantes o con efecto de calor. Jamás uses lubricante anal con anestésicos, porque podría haber fisuras o desgarres sin darte cuenta.
  • Base de aceite. Pueden manchar la ropa, sábanas y cualquier tela. Debes tener precaución al usarlos, porque pueden romper los condones de látex. Alteran el pH femenino, por lo que podrías presentar reacciones alérgicas.
  • Lubricantes comestibles. Algunos tienen azúcar, que afecta el pH vaginal, haciéndola propensa a infecciones.
  • Base de silicón. Su poder lubricante es más elevado, por lo que funcionan a la perfección en relaciones bajo el agua. Pueden ser irritantes. Además, debes evitar usarlos con juguetes sexuales de silicón porque pueden dañarse. Unas gotas son suficientes para disfrutar al máximo.

Aprende a sacarles el máximo provecho

  • Es mejor si no contienen vaselina o aceite, para evitar daños en la vagina.
  • Puedes elegir entre los lubricantes de crema, gel, líquidos o en supositorio.
  • Si piensas usar lubricante para el sexo anal y vaginal, deberás tener uno para cada zona. De esta forma evitarás infecciones.
  • Puedes aplicar el lubricante sobre el pene con o sin preservativo. En cambio, una o dos gotas bastarán en el clítoris y la vulva.
  • No uses lubricante en exceso porque el condón podría salirse o irritarte la mucosa femenina.
  • Asegúrate de que el lubricante no ha caducado.
  • Después del sexo, lava la zona genital para quitar los restos de lubricante.