A la mayor parte de la población femenina le gustaría afirmar que no se deja controlar por un hombre. No obstante, el día de hoy existen parejas que no tienen un control sobre su relación. Inclusive las mujeres más independientes suelen caer en el juego de control cuando un chico les gusta mucho. Por supuesto que en una relación amorosa debe existir el compromiso. Por otra parte, no tenemos que ser nosotras las que pongamos el dedo sobre el renglón todo el tiempo.
No dices que sí a todas las citas
Una parte muy importante de no ser controlada por un hombre es no estar a su disposición el 100% de las veces. Finalmente, tú también tienes compromisos y cosas que hacer. ¿Por qué deberías mover toda tu agenda para hacerle un espacio? Si ya tienes una relación con él, mediar tiempos es lo mejor que pueden hacer. Sin embargo, no es bueno para ti que tú corras desesperadamente hacia él cada vez que se le antoja.
Te aceptas tal cual eres
No importa si estás pasando por un mal momento, sabes perfectamente quién eres y cuál es el camino a seguir. Finalmente, es menos probable que una mujer que se conoce a sí misma se deje controlar por un hombre. Tu opinión siempre será la más valiosa y eres capaz de admitir cuando algo se te ve muy bien o has tenido un gran éxito.
Sabes ponerte límites
No eres una de esas mujeres que necesitan de alguien más para saber hasta dónde pueden llegar. De hecho, sabes ponerte límites y los respetas. Te amas lo suficiente para aceptar lo que es mejor para ti. Una mujer que no se deja controlar por un hombre conoce sus alcances, lo que no le gusta y lo que sí. Es capaz de tomar decisiones sin que intervenga alguien más.
Sabes lo que quieres y no tienes miedo de luchar por ello
No es que vayas a pisotear a todo el que se te ponga enfrente. Sin embargo, tienes muy claros tus objetivos y estás dispuesta a hacer lo necesario para alcanzarlos. Eres una mujer que no se deja controlar por un hombre, sino que se guía por su conocimiento, experiencia e instinto. Siempre tienes presentes tus metas y eso es lo que te hace crecer como mujer en todos los aspectos.
Ser una mujer independiente requiere de mucho esfuerzo y corazón. Nunca pares de luchar por ti.