Cómo mamás responsables tenemos que tener cuidado cuando le damos un juguete a nuestros pequeños. Pese a que existen reglas estrictas en torno a los juguetes infantiles, en muchos lugares los juguetes dañinos siguen al alcance de la mano de muchas mamás.
Conoce un poco más acerca de qué precauciones tomar al comprar estos objetos para tus hijos, o qué hacer cuando se los regalan.
Aguas con los químicos
Los juguetes pueden parecerte seguros; sin embargo, aunque se ofrezcan en una tienda pueden estar fabricados con sustancias químicas nocivas. Hay sustancias que hacen que el plástico sea más flexible y duradero. Estos son evidentemente fuertes químicos. Estas sustancias plastificantes se usan en joyería, juguetes y peluches. Siempre lee la etiqueta de los juguetes en busca de sustancia como cadmio, plomo, mercurio y arsénico y evítalos a toda costa.
Imanes
Los imanes constituyen un gran peligro doméstico. Algunos juguetes contienen pequeños imanes, que podrían salirse y ser ingeridos por los infantes. Dos o más imanes se atraen entre de ellos, a tal grado que pueden atraerse a través de las paredes intestinales. Si tu pequeño consume accidentalmente un imán este puede ocasionar: perforaciones, obstrucciones, infecciones y trastornos aún más graves si no se detectan rápidamente.
El juguete adecuado para tu hijo según su edad
Los juguetes normalmente tienen una etiqueta de edad recomendada, la cual debes respetar siempre. Sé realista en cuanto a la capacidad de tus hijos y su nivel de madurez cuando elijas su juguete.
No hay alguno más nocivo que el que no se sabe manejar. Un gran ejemplo de esto es los que traen piezas pequeñas. Si tu pequeño no tiene la madurez para usarlos probablemente acaben en su boca o, peor aun, en su nariz.
Es cierto que existen juguetes dañinos para nuestros pequeños. Sin embargo, debemos tener cuidado al elegirlos. Es nuestra responsabilidad darles a nuestros hijos los juguetes adecuados para asegurar su integridad física.