La violencia doméstica deja en las mujeres muchas huellas difíciles de borrar. Así mismo tras abandonar esta dolorosa situación existen ciertos procesos que debe vivir para liberarse del dolor y la dependencia. En este sentido es fácil olvidar el daño que esa situación causó a los hijos. Ellos también sufrieron una situación de maltrato que daña su desarrollo emocional y psicológico. Por tanto, si tus hijos han vivido violencia doméstica, es mejor que leas esto.
Ellos aprenden de tu relación de pareja
Tus hijos aprenden todo de ti. Sí, tanto lo bueno como lo malo. Por eso es normal que repliquen algunos de tus hábitos, actitudes y manías. Recuerda que ellos están construyendo tanto su personalidad como su visión del mundo. En este sentido la relación con tu pareja es uno de los pilares de lo que aprenderá más. Por ejemplo, si ve que tu esposo te grita, humilla o golpea y tú lo permites, aprenderá que está bien lastimar a la persona que ama. Así mismo si ve que tú permites el maltrato, él entenderá que es algo normal y está bien.
Trastornos emocionales causados por la violencia
Un niño que ha sufrido abuso y violencia tiene problemas para controlar sus emociones. Puede pasar de un estado de completa calma a la ira en segundos. Así mismo, su risa se convierte en llanto por motivos sin importancia. También puede lastimar a otros niños sólo para liberar toda la tensión y dolor que siente. Por eso es importante que tus hijos tengan atención psicológica, de esa manera procesarán el dolor de una manera sana.
Podría ser un adulto violento
Cuando una persona sufre maltrato físico y emocional durante su infancia, es propenso a ser un adulto violento. Por tanto, es muy importante que reciba atención psicológica para sanar y desarrollarse adecuadamente. Además, piensa que cada acción que tu hijo realice, afectará la vida de muchas personas. Por ello es preferible que sea una persona sana capaz de ayudar a los demás antes que lastimar.