Las apps para citas son cada vez más comunes. Si tienes menos de 20, quizá las veas como lo más normal, y si tienes más de 30, puede que te sigan dando miedo. Sin embargo, hay historias de amor muy bonitas que empezaron con una app de citas. Cualquiera que sea el caso, la realidad es que existen muchos casos de citas que acabaron en fracasos y, peor aún, otros fueron riesgosos. Este es el lado oscuro de utilizar apps para citas.
No todos son tan honestos como tú
Se trata de vendernos a nosotros mismos, así que obviamente vas a poner lo mejor de ti en tu perfil: la mejor foto y tus mejores características. El problema es que no todos son igual de honestos que tú. Es super fácil exagerar quién eres y cómo eres en redes sociales. Y esto va mucho más allá. Una vez que hablaste con alguien puede sonar encantador, decirte justo lo que quieres escuchar, hablarte de planes a futuro. Una vez que salieron juntos, incluso tuvieron qué ver… ¡boom! Desaparece y no vuelve a buscarte nunca más. ¿Qué fue lo que pasó? Seguramente el tipo solo buscaba eso desde el principio, y tú caíste redondita. Así que mejor llevársela leve y, sobre todo, ¡confía en tu intuición!
No es quien dice ser… literalmente
Así como resulta fácil exagerar quién eres, también es fácil hacerte pasar por otra persona. Esto es tan común en redes sociales, que ya hay un término para ello: pishing o suplantación de identidad. Se trata de gente que roba la identidad de alguien más en redes sociales, desde bajar sus fotos hasta copiar su ocupación y hobbies. De este modo, cuando te conozcan en la app de citas creas que son esa persona.
Enfermedades al por mayor
Si teniendo pareja estable o saliendo con alguien que ya conocías el riesgo de contraer alguna enfermedad de transmisión sexual es alto, ¡ahora imagínate con alguien que no tienes idea de dónde salió! No quiero sonar a abuelita, pero claro que hay que tomar precauciones y más si se trata de una app de citas. Lo mejor será que definas qué es lo que estás buscando y con base en eso, decidas. Tal vez sólo buscas noches de pasión y de ser así, ¡siempre cuídate!
