Esta es la leyenda del hilo rojo, ¿será cierta o no?

Cada cultura tiene sus creencias en el amor. Por ejemplo: en Estonia las parejas salen a buscar flores del helecho en el bosque, en el verano. Cuando las hallan, hacen una fogata y saltan sobre ellas. En Francia, las solteras de 25 años de edad en adelante deben usar sombreros verdes y amarillos el Día de Santa Catalina. Pero si hablamos de leyendas de amor, sólo se me viene una a la mente: la del hilo rojo.

Dos versiones

Esta leyenda se centra en que existen almas gemelas. Sin embargo, hay dos versiones. Una proviene de China e indica que el abuelo de la luna sale en las noches para recorrer la Tierra. Su objetivo es conocer a los recién nacidos, a quienes les ata un hilo rojo. ¿Para qué? Para que éste decida su futuro. En tanto, en Japón se cuenta que un joven emperador quería saber quién sería su esposa. Como sabía de la existencia del hilo rojo, buscó a una bruja que podía ver los hilos rojos de todas las personas. Ésta lo llevó con una campesina que tenía un bebé en brazos, pero al joven no le agradó dicha mujer; la empujó y el bebé se cayó, haciéndose una herida en la frente. Pasados los años, el emperador conoció a una chica de la que se enamoró y se convirtió en su esposa; ésta tenía una particularidad: una cicatriz en la frente.

Misión del hilo rojo

Independientemente de con qué versión te quedes, lo más importante de esta leyenda es que indica que éste está con cada persona desde su nacimiento y siempre la acompañará. Es invisible y lo lleva en el dedo meñique.

Nunca se romperá

La leyenda igual indica que “no importa lo que tardes en conocer a esa persona ni si se encuentra en la otra punta del mundo: el hilo se estirará hasta el infinito, pero nunca se romperá. Su dueño es el destino”. Es decir, pasará lo que tenga que pasar porque el destino ya lo tiene escrito. Y aunque a veces lo dudes, ahí afuera está tu persona, quizá esperándote como tú a ella.

El amor es amor

¿Crees que esta leyenda es cierta? Yo creo que tiene algo de cierto: el amor es amor y cuando lo sientes, lo sientes. ¿De dónde surge? No sé. Es algo que se da o no se da y puede provenir de la persona que menos imaginaste; en parte, eso hace que el amor sea mágico. Así que es algo que sabrás cuando llegue esa persona, tu persona.