Dime qué tiene poder sobre ti y te diré cómo darle la vuelta

A todas nos ha controlado algo en nuestra vida. Puede ser un amor no correspondido, depresión, ira, incluso cosas materiales, como el dinero y lo que puedes comprar con este, o la comida. En fin todos ellos implican problemas internos que nos mantienen atadas. Sin embargo, admitir qué tiene poder sobre ti puede ser la mejor forma de iniciar un cambio interno. Este te llevará a una vida mucho más tranquila y feliz.

El no tener control sobre las cosas hace que nos controlen

Cuando algo tiene poder sobre ti es porque no te sientes con el control necesario sobre eso. Es decir, nos controla aquello sobre lo que no tenemos control. Un ejemplo frecuente es la ansiedad. Abres el refrigerador para buscar algo dulce o salado pues tienes ansiedad por comer algo. Cuando no encuentras ese algo cierras el refrigerador frustrada. Acto seguido, después de 15 minuto crees que mágicamente habrá algo en el refrigerador esperando por ti. Siguiente acto decides sucumbir ante la ansiedad y sales a comprar. No es que la comida sea la cosa que te controle, realmente lo que controla a muchas personas de nuestra sociedad son las emociones sin control, en este caso la ansiedad.

Lista para darle la vuelta.

Dale control a tu mente

Salir de la zona de confort no es sencillo. Al final, esta es la primera causa por la cual las actividades que requieren control mental, como las dietas, hacer ejercicio o incluso tomar decisiones sobre el futuro, fracasan. Dejamos que el exterior nos influya y, peor aún, no hacemos nada para avanzar. Por otra parte, cuando consigas tomar conciencia de que no asumes decisiones por miedo a fallar o porque no puedes controlar sus consecuencias, entonces podrás empezar el cambio y ponerle un alto.

No puedes dejar que tus inseguridades y miedos tomen las decisiones más importantes de tu vida. Deja de pensar en los fallos que puedes cometer, pues estás predisponiéndote a tenerlos. Piensa que lo peor que puede suceder es que no salga como esperas, pero aprendes de ello y mejoras un poco más.

Deja de meterte ideas en la cabeza

¿Cuántas veces no has puesto tu negatividad antes de iniciar un proyecto o incluso antes de probar algo nuevo? Es sencillo echarse para atrás sin ver el escenario completo. Después de todo, ¿cómo va a salirte algo bien si desde el principio te programas para el fracaso? Ábrete a nuevas experiencias, no tiene nada de malo; quizá hasta la situación se torna mejor de lo que aparenta. Es un buen momento para dejar de hacerte la víctima por las cosas que te salen mal y encontrar el verdadero problema. Que la mayor parte del tiempo se encuentra en nuestro interior.

Deja de ponerle tantos peros a la vida, que tarde o temprano vas a arrepentirte por todas las oportunidades que dejaste pasar en el camino. Busca la felicidad a donde vaya, proponte metas, deja atrás esta negatividad que no sirve de nada.