Tal vez tu mamá o tu abuela cada que vez que tu hijo anda descalzo te dicen que no lo permitas porque eso le hará daño. Incluso, quizá cuando tú eras pequeña usaste botas para corregir el tobillo. Lo cierto es que este calzado te daba poca libertad para moverte.
Es mejor dejar al niño descalzo
Cada pie de tu hijo está formado por 26 huesos, 33 articulaciones y poco más de 100 tendones, músculos y ligamentos. Debido a esta magnífica estructura, el pie está preparado para caminar en todo tipo de terrenos. Sea en una montaña, entre piedras, trepar árboles, todo es posible gracias a la estructura.
Al dejar que tu hijo ande descalzo por ratos en tu casa o en el parque ayudas a que su desarrollo sea mejor. Sus pies son más fuertes y se da un mejor aprovechamiento de la estructura de sus pies. No pienses que se resfriará si lo dejas andar así. Con una dieta saludable evitarás que se enferme con facilidad. No olvides que si proteges su pie lo ayudas a que se ejercite lo suficiente para estar apto para todo tipo de superficie.
No impidas que tu hijo tenga un buen desarrollo
Muchas veces, nosotras mismas sabemos que es correcto dejar que nuestro hijo ande descalzo y sin embargo lo evitamos por miedo a que se resfríe. Sin embargo, el resfriado no entra por los pies, como lo explica la pediatra Gloria Colli. Indica que los resfriados surgen por virus o frío.
Virus
Los virus pululan por dondequiera en cualquier época del año. Éstos pasan del tracto respiratorio de una persona al de otra de manera directa (cuando hablamos o estornudamos). También se contagian de manera indirecta al tocar superficies donde hay virus. Después nos llevamos las manos a la boca o nariz y los virus se quedan en las mucosas.
Frío
Nos enfermamos con más facilidad cuando hace frío porque los virus aprovechan los sitios calientes para reproducirse. Cuando nosotras permanecemos encerradas en sitios cálidos los virus aprovechan. Después, cuando tenemos que salir por alguna razón, el frío provoca vasoconstricción en la mucosa. Debido a que hay menos defensas se derriba la barrera que evita el paso de los gérmenes al tracto respiratorio.
Dicho todo esto, podemos resumir lo siguiente. Si estuvieras en un sitio frío y anduvieras descalza y no hubiera virus, no te enfermarías. Por el contrario, si estuvieras en un lugar donde hubiera virus pero no hiciera frío te enfermarías poco. En caso de que aún así tengas la inquietud, puedes optar por ponerle calcetines. Pero deja andar descalzo a tu hijo, lo ayudará mucho.
