Cuando te sientas decepcionada de la vida tienes que…

¿Cuándo te sientas decepcionada de la vida? La decepción aparecerá en la vida de vez en cuando. A veces vas a odiar la vida, tanto que vas a querer gritarle a dios al mundo o al universo que no estas de acuerdo. Pero sabes que a la vida no le importa si estas de acuerdo o no, de hecho le vale 3 kilos de cominos. Así que tienes que aprender a disfrutar lo poco o mucho que puedas aún cuando la vida te golpee con fuerza.

La vida a veces no es justa, solo es lo que es

No todo en la vida te va a hacer bien. Las lecciones más valiosas a veces se dan en los momentos más difíciles. Hace dos años estaba en un sube y baja emocional bastante fuerte. Entonces mis amigas me incitaron a salir co un chico que me buscaba mucho. Una buena amiga me arrastro hacia el restaurante en el que tuve la primera cita con él. La verdad es que tuve una increíble primera cita, se sentía la electricidad en el aire. Fue realmente maravilloso.

Señales de que tienes una baja autoestima

Todo parecía mejorar

La presencia de este chico me dio otra vez la ilusión de vivir. Hacia años que no me enamoraba. Pero cuando estas en el mood en el que yo me encontraba, tienes la receta perfecta para el desastre. El chico que al principio parecía el príncipe azul termino siendo un depredador. Al poco tiempo de relación comenzó a tratarme muy mal. Yo me encontraba mal psicológicamente y nunca le supe poner límites. Fue así como termine golpeada por un hombre que decía que me amaba. Afortunadamente me aleje de él todo lo que pude. En ese momento tenía el corazón hecho tiritas y con las piezas que quedaban le reclamaba a la vida todo lo que podía. Después de todo yo siempre he sido buena con los hombres a mi alrededor.

Todo lo que pasa por la mente de una chica al tener sexo oral

Busque amor en los lugares equivocados

Después de ese evento desafortunado, acabe saliendo con un amigo al que yo tenía plena confianza. Pero no falto más que unos vasos de alcohol para que yo comenzara a llorar y el a aprovecharse de la situación. Perdida, con el rímel corrido y sintiéndome como la peor mujer de esta tierra. Sali de casa del supuesto amigo, sin mucho conocimiento del día que había pasado.

Odie la vida

El coraje que yo tenía en las venas en ese momento era tal que juraba que odiaría a cuanto hombre se me acercara. Comencé a comportarme como un animal herido. Me volví fría, desconfiada y todos los días me recordaba a mi misma el dolor que había sentido en los últimos años. Paso un largo tiempo como 2 años de mi vida, donde leí mucho sobre autoestima y poder personal. Me di cuenta que muchas cosas fueron mi culpa pero no podía seguir reviviendo el dolor.

Mentiras sobre el amor que debemos dejar atrás

La resistencia es inútil en el juego de la vida.

Vi que no tiene sentido resistirse a las experiencias de la vida, incluso a las que desprecio, porque siempre perderé. Mi conducta no va a cambiar las circunstancias indeseables de la vida, de hecho me va a impedir disfrutar de las cosas buenas. Cuando te concentras en lo malo y lo incorrecto ves tu vida a través de una lente llena de oscuridad. La percibes y la vives de esa manera.

Determinamos nuestra propia mentalidad.


En el mundo de la psicología, se cree que no podemos experimentar nada fuera de nuestra forma de pensar. Y si nuestra mentalidad es predominantemente negativa, entonces la tristeza, la culpa, la ira y el resentimiento serán nuestras principales experiencias. Así es como te pierdes de las cosas buenas. Las cosas buenas como tener a mi familia cerca, mi gatita yendo por su abrazo matutino, mi habilidad para dibujar, mi fuerza ganada al hacer ejercicio. No importa si las cosas que te hacen feliz son muy chiquitas, siempre hay bendiciones que agradecer.

La gente bendecida es la gente feliz.


Las personas felices tienden a tratarse bien a sí mismas con buenos hábitos, como una alimentación saludable y elecciones de estilo de vida, y establecer límites en las relaciones. Tratan a los demás de manera respetuosa y digna, con bondad, compasión y comprensión. La incomodidad siempre va a existir, en algún punto vas a tener que entregarte a ella. Así que vive el dolor, pero no te ahogues. Busca las cosas buenas a tu alrededor. A veces las cosas más chiquitas de esta vida pueden ser nuestro salvavidas.

Debajo de su mente furiosa, hay un núcleo sólido de invencibilidad, la tranquila estabilidad de su naturaleza espiritual, es algo que descubrí en estos años.