Jamás me había percatado de todo lo malo que podría significar tener un nombre común. Tal vez en la actualidad eso no suceda tanto, pues con tantas “modas” que hay, los padres optan por poner nombres bastante extraños o fuera de lo común. Yo nací en otra generación, en la que parece que todos, o casi todos, los padres se ponían de acuerdo para ponerle el mismo nombre a los hijos. Por eso, tuve, y sigo teniendo, experiencias bastante extrañas y he decidido escribir esto. Seguro habrá más de una chica que me entienda.
María 1, María 2, María 3
Las primeras experiencias las tuve al ingresar a la escuela, en donde comprobé que no era la única niña llamada María. Muchas otras chicas tenían se llamaban igual que yo y para que la maestra no tuviera confusiones, nos enumeró. Otros maestros optaron por llamarnos mejor por el apellido, para que así no hubiera confusiones.
Peor, si también tienes un apellido común
Lo malo es que parece que también hay varios apellidos comunes y eso complicaba el asunto. Durante varios años tuve una compañera que compartía el mismo nombre y un apellido. Así que teníamos que esperar a que dijeran nuestros nombres completos para saber a cuál de las dos nos hablaban.
Miles de apodos
Cuando la denominación es la misma durante mucho tiempo, surgen miles de ideas. Los apodos se incrementan y bueno, quienes corremos con esa suerte, conocemos más y más apodos que no dejan de pasar de moda sin importar la época en la que estemos.
¿Por qué te llamaron así?
Es la pregunta de muchos de mis amigos o conocidos. ¿Por qué si hay otras tantas opciones en el mundo, mis padres eligieron esa? ¡Cómo diablos me lo preguntan a mí, como si yo hubiera sido quien les dijo: “Sí papás, pónganme así!”. Si hubiera sabido que me iban a decir tantos apodos y que no sería un nombre nada común, seguro lo hubiera elegido.
¿No tienes otro nombre?
Qué más daría por tener otro nombre, para que al menos así tuviera dos opciones entre las cuáles elegir. Podría elegir entre uno y otro y así no sería tan complicada mi vida.
Nombre de usuario no disponible
Una de las peores cosas es a la hora de registrarme en la red. Piden mis datos, los pongo y a la hora de seleccionar un usuario, no hay opción disponible. Tengo que probar varias opciones para que entonces sí pueda registrarme. Eso es realmente patético.
Cuando llegas a un lugar en donde nadie comparte tu nombre…
Lo mejor que me puede pasar, es llegar a un salón, a una fiesta o a una comida en la que nadie se llama de la misma forma que yo. Eso sin duda es como el paraíso.