Existen muchos mitos y mentiras acerca de la naturaleza femenina. Nos llaman superficiales, tontas, dramáticas, sufridas y una interminable lista de ignominias que deben parar. Desafortunadamente, la violencia contra la mujer está disfrazada e integrada en una cultura que nos señala por todo lo que hacemos y lo que no. Como mujeres, tenemos la obligación de romper estos mitos y apoyarnos las unas a las otras. Estas son algunas actitudes que no nos hacen chicas superficiales.
Usar maquillaje
En muchas ocasiones he escuchado que el maquillaje solo le gusta a las chicas superficiales y vanidosas. Desgraciadamente esto solía decirlo una maestra de la universidad a la que iba. Recuerdo perfectamente cuando nos decía que le parecían tonterías o intereses de mujeres huecas. Obviamente esto es mentira, cada quien es libre de hacer con su persona lo que mejor le plazca. Claro está sin que lastime a algún tercero. Maquillarnos, pintarnos y arreglarnos el cabello es un acto de amor propio. Procurar nuestra imagen es una señal de autoestima, por tanto, no es bobo ni superficial.
Amar la moda y el estilo no te hace superficial
Incluso el gran diseñador Valentino afirma que el buen gusto es una característica de las personas educadas. El buen gusto dice de nosotras que sabemos lo que queremos, así mismo conocemos nuestra corporalidad, ánimo y creatividad. Por tanto amar el estilo, la moda, estar al pendiente de las tendencias nos hace personas dinámicas que se renuevan constantemente. Por tanto, no hay nada malo en mantenerse en movimiento, buscar aquello que nos llama e incluso lucir espectaculares cuando lo decidimos.
No querer hijos o familia
Muchas veces, he escuchado tanto a hombres como a mujeres decir que las chicas superficiales no buscan algo serio. También, se dice que las chicas superficiales tienen relaciones solo para aparentar. Esto es una mentira, tanto hombres como mujeres tienen derecho a no formar una familia. No todas las mujeres desean ser madres ni esposas y eso está bien. Muchas chicas prefieren dedicarse a su crecimiento profesional y personal. Eso no las hace valer más o menos que cualquier otra persona. ¡Basta de criminalizarnos por hacer lo que queremos!
Llamar la atención
Conozco a muchas chicas que, sin querer, llaman la atención de distintas personas. Son mujeres que con su presencia y porte hacen que los demás las observen. En primera instancia, ninguna mujer puede, ni debe, deshacerse de su coquetería natural. En segundo lugar, es bueno amarse y demostrar lo orgullosas que estamos de nuestra corporalidad, belleza y forma de ser.
