Capacitismo, ¿qué es y cómo combatirlo?

Seamos honestas, ¿cuántas veces has visto a una persona con discapacidad y piensas que es incapaz de hacer las mismas cosas que tú solamente por su condición? ¿Alguna vez alejaste a tus hijos de alguien con capacidades diferentes para evitar problemas? ¿Has notado que en muchos espacios públicos no hay condiciones adecuadas para el acceso a personas que padecen alguna discapacidad? Pues aunque no lo creas, ese tipo de hechos y actitudes son discriminatorias y son parte de una sociedad que tiene muy arraigado el capacitismo. Te voy a contar todo lo que sé sobre el significado de esta palabra desconocida para muchas.

¿Qué es el capacitismo?

Esta palabra fue acuñada para definir actitudes y hechos discriminatorios de las personas “capacitadas” hacia quienes no lo son. Pero no se trata solamente de que alguien piense que una persona sin piernas no puede hacer deporte, por ejemplo; el capacitismo también puede verse a nivel institucional. ¿Cuántas veces has pasado por una acera que no tiene rampa para sillas de ruedas?, ¿cuántos semáforos conoces que tienen sonido para indicarle a personas con problemas visuales que es momento de cruzar la calle? Es así como las instituciones ayudan a perpetuar la idea de que las personas con capacidades diferentes deben adecuarse al mundo para personas “capacitadas”.

El efecto halo

Se trata de cómo creemos que es una persona (y cómo la trataremos) a partir de una de sus características visibles. Es super común que conozcas a alguien y pienses: “se ve que es una buena persona“, solamente porque te sonrió cuando la miraste, ¿cierto? Lo mismo pasa cuando conoces a alguien que no tiene un brazo, que necesita aparatos para trasladarse de un lado a otro, o que tiene algún síndrome que afecta su apariencia física, como el de Down. La tendencia es que, cuando conocemos a alguien con estas características, pensamos que es incapaz de actuar, pensar o sentir como podría hacerlo cualquiera de nosotras; esto es parte del capacitismo.

¿Cómo puedo evitar tener una actitud capacitista?

Si leyendo esto descubriste que el capacitismo ha hecho de las suyas contigo, aquí tienes unos consejos para evitarlo.

  • Adopta la idea de la diversidad funcional. Basta de hablar de las personas diferentes como “discapacitados”. Te aseguro que a nadie le gusta que se dirijan a él con esa palabra. Lo mejor es hablar de una diversidad funcional para comprender que todos somos diferentes y capaces de hacer las cosas de maneras distintas. Incluso entre las personas “capacitadas” hay diferencias.
  • Evita el efecto halo. Es difícil, porque tenemos muy arraigadas estas actitudes y pensamientos, pero no es imposible. Lo más complicado es darte cuenta de que suponer algunas “deficiencias” de otros por cómo son físicamente puede lastimarlos. Después de aceptarlo, será mucho más sencillo evitar actos o palabras hirientes y discriminatorias.
  • Inculca a tus seres queridos el valor de la diversidad y la tolerancia. Tal vez creas que modificar esto no podrá cambiar el mundo, pero te equivocas. Poco a poco podemos modificar la visión de la sociedad sobre la diversidad funcional y así, algún día, podremos vivir en un ambiente sin discriminación para nadie. ¡Seremos muy felices todos!

¿Crees que en tu entorno prevalece el capacitismo?