Aprende a dividir gastos con tu pareja sin morir en el intento

El dinero no tiene porqué ponerle fin a tu relación. Aprender a dividir gastos con tu pareja puede que suene más complicado de lo que realmente es. Sólo tiene que sentarse y ponerse de acuerdo, deben buscar algo que les acomode a los dos. El punto de esto es que se sientan cómodos con el arreglo al que lleguen. Para lograrlo pueden tomar en consideración los siguientes puntos, discutirlos, ver si se ajustan a sus necesidades y expectativas y probar.

Dividir gastos con tu pareja por igual

Funciona si tú y tu pareja tienen una cantidad de ingresos semejante. Al ganar los dos casi la misma cantidad de dinero, pueden compartir los gastos de manera igualitaria. Sólo tendrían que sacar cuentas, ver cuánto es el total de sus gastos mensuales y dividirlos por la mitad. Les recomendamos abrir una cuenta en la que ambos depositen su monto. Será esa cuenta la que usen para pagar los gastos en común y fijos (renta, servicios, despensa, etc.).

Dividir los gastos según el ingreso

Esto es adecuado para las parejas que no tienen un ingreso parecido. No hay ningún problema, sólo tienen que dar un porcentaje proporcional de acuerdo a sus ingresos. Por ejemplo: ambos dar el 45% de su salario. Esto para tener un sentido de equidad en sus gastos. De igual manera, te recomendamos abrir una cuenta y depositar lo que les toca. Este tipo de acuerdo, además de equidad, les dará la posibilidad a ambos de tener un poco de dinero para ustedes mismos. Además de aumentar su capacidad de ahorro.

Pagar cada quien lo suyo

Esta es una recomendación para los que tiene deudas, por ejemplo, alguna compra personal a meses sin intereses o las mensualidades de un coche. Pueden hacer el ejercicio anterior y dividir los gastos en común, pero cada quien paga sus deudas personales. En este rubro pueden entrar cosas como créditos hipotecarios y mensualidades de una compra relacionada con su área de trabajo (computadora, hardware, libros, herramienta, material, etc.).

Que uno de ustedes cubra todos los gastos

Dividir los gastos con tu pareja de esta manera puede ser asunto delicado, habrá que sentarse a la mesa y ver si ambos están de acuerdo. Esto puede darse si alguno de ustedes, además de percibir poco, tiene gastos fuertes, como el pago de un coche, o de su maestría, por ejemplo. Por otro lado, puede que alguno no perciba nada.

Recuerda que lo importante es llegar a un acuerdo entre los dos. Hablen de todas las posibilidades que hay, encuentren la mejor solución y respeten el acuerdo al que lleguen.