Nunca imagine que podría enamorarme y andar con un hombre mayor, 14 años más que yo. Siempre me han dicho mis padres: “Nunca digas nunca” . Y así fue, siempre dije que jamás andaría con alguien mayor que yo, y caí. Siempre fui una persona que criticaba a las chicas que se relacionaban con hombres mayores… hasta que lo viví.
Alguien inesperado
Terminando la preparatoria estudié por un tiempo el idioma inglés. Después de medio año me fui a vivir a otra ciudad donde residía mi hermana. Tuve que partir porque estaba a nada de entrar a la universidad. Por obvias razones no tenía amigos en dicha ciudad más que a mi hermana, así que ella muy amablemente me presentó a sus amigos para relacionarme con más personas. Fue así cómo lo conocí.
Un hombre mayor me encantaba con fervor
Durante una fiesta de cumpleaños conocí a quien ahora es mi ex novio. Cruzamos unas cuantas palabras e inmediatamente me di cuenta de que me gustaba mucho. Terminando la fiesta nos pasamos nuestro Facebook. Al día siguiente, revisé mi celular ya había enviado la invitación, inmediatamente la acepte y me escribió. Pasó como una semana para que saliéramos. La reacción de mi hermana fue de sorpresa, pero me apoyó. Incluso me arregló para verme un poquito más grande, pues el tenía 32 años y yo apenas 18 años.
Lo mejor de la relación
Bastaron unas salidas para que me decidiera a darle el sí. Duramos aproximadamente 11 meses. La relación fue muy buena. Relacionarte con personas mayores tiene muchas ventajas, él siempre me consentía, me llevaba a donde quería, protegía, me compraba todo lo que pedía. Varias veces nos fuimos de viaje, siempre tenía buenos consejos que darme así como regaños. Lo mejor era que veía las cosas de diferente forma. Además, me ayudaba a ver cosas que mi edad no me lo permitía.
Lo malo siempre sobresale en cualquier sitio
Su familia jamás vio mal nuestra relación. No obstante el problema fue cuando mis papás se enteraron, estaban muy preocupados. Los prejuicios siempre predominan y jamás vieron todo lo bueno que hizo por mí, al contrario. Siempre lo rechazaron al igual que mis amigos. Varias ocasiones lo invité a salir porque quería que lo conocieran, pero él jamás aceptó. Mis amigos siempre me criticaban porque andaba con alguien mayor. Incluso me presentaban a chicos de mi edad para que terminara mi relación. Lo peor de tener una relación con un hombre mayor son las críticas, Finalmente, estas pesaron y predominaron; entonces preferí ser aceptada por la sociedad que ser feliz junto a él.